ÁMSTERDAM, 19 Jul. (DPA/EP) -
Las autoridades públicas y el sector privado de Países Bajos ha comenzado a aplicar esta semana una serie de medidas extraordinarias destinadas a paliar los efectos de la ola de calor que azota el país, dejando temperaturas superiores a los 40 grados centígrados.
Entre estas medidas se incluye el esparcimiento de sal en las carreteras neerlandesas con el fin de refrescar el pavimento, que en circunstancias como las actuales puede llegar incluso a alcanzar los 50 grados centígrados.
Asimismo, los numerosos puentes móviles instalados en la capital, Ámsterdam, están siendo constantemente baldeados para refrigerar la estructura y evitar que, con la dilatación del acero, se atasquen.
Por su parte, la cadena de supermercados más grande del país, Albert Heijn, ha suspendido su servicio de entrega a domicilio para evitar que sus repartidores tengan que trabajar en estas condiciones, una medida que sin embargo no ha sido bien recibida por parte de los consumidores, que han criticado la decisión a través de redes sociales.
El servicio meteorológico de Países Bajos ha informado de que, a lo largo de estos días, se prevén temperaturas cercanas a los 40 grados centígrados en el sur y sureste del país, e incluso también en zonas costeras, donde las condiciones climatológicas normalmente son más frescas.