BRUSELAS, 29 Oct. (EUROPA PRESS) -
Los países más transitados por los refugiados que recorren la ruta de los Balcanes para entrar en la Unión Europea han confirmado este jueves que pueden ofrecer 12.000 plazas de acogida de manera "inmediata", como parte del compromiso del pasado domingo de ofrecer 50.000 antes de finales de año.
Austria ha informado de que dispone de 5.000 plazas, Serbia cuenta ya con 3.000, también Croacia ofrece 3.000 y Eslovenia, 2.000, según ha informado la Comisión Europea tras una videoconferencia con los representantes de los países.
Este primer compromiso concreto es el resultado de la mayor coordinación que acordaron poner en marcha los jefes de Estado y de Gobierno de los 13 países más afectados por el paso de demandantes de asilo por esta ruta, que arranca en Grecia y recorre los Balcanes con destino a Alemania.
Los líderes acordaron aumentar en 100.000 plazas la capacidad de acogida de refugiados de la región, conscientes del riesgo de "drama humanitario" que se producirá con la caída de las temperaturas bajo cero este invierno y miles de inmigrantes obligados a dormir en la intemperie.
La mitad de estas plazas deberá crearlas Grecia sola en su territorio antes de que acabe el año, aunque contará con la ayuda del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) para ofrecer ayudas a familias de acogida para cubrir 20.000 de esas plazas.
Fuentes comunitarias han indicado que Atenas ha explicado sus planes para responder a este objetivo, pero no han ofrecido más detalles sobre el modo en que planea hacerlo ni han dado una cifra de cuántos refugiados podrían contar ya con la acogida.
Otro de los compromisos de los que han rendido cuentas en la videoconferencia de este jueves es del despliegue de 400 efectivos policiales de estos países en Eslovenia, para ayudar en el control de su frontera.
En estos tres días desde la minicumbre del domingo, los socios de Eslovenia han confirmado un apoyo de 183 agentes, de los que 13 han llegado ya a la zona y otros 30 están a punto de hacerlo.
La Comisión, además, ha recordado a los representantes de los países que tienen hasta el próximo 4 de noviembre para evaluar y comunicar las necesidades específicas técnicas y financieras para gestionar esta crisis, con el objetivo de que Bruselas pueda responder con apoyo.