ISLAMABAD 27 Mar. (Reuters/EP) -
Pakistán ha comenzado a construir una valla en los 2.500 kilómetros de la disputada frontera con Afganistán para prevenir las incursiones de los milicianos, según ha dicho el general Qamar Javed Bajwa, jefe del Ejército de Pakistán, en una medida que probablemente haga más tensas las relaciones entre los dos países.
El general Bajwa ha dicho que la valla fronteriza inicial se centrará en "las zonas de alta amenaza" de Bajaur y Mohmand, dentro de las Zonas Tribales de Administración Federal (FATA), que hacen frontera con las provincias afganas orientales de Nangarhar y Kunar.
"Otros medios de vigilancia técnica también están siendo desplegados a lo largo de la frontera, además de la vigilancia aérea regular", ha informado el Ejército en un comunicado durante el fin de semana en el que citan al general Bajwa. De momento no hay declaraciones de las autoridades afganas.
La tensión en las relaciones entre Kabul e Islamabad se ha endurecido en los últimos años, con ambos países acusándose mutuamente de no hacer lo suficiente por enfrentarse a los talibán paquistaníes y afganos.
Pakistán ha culpado a los talibán paquistaníes de situarse en suelo afgano tras una serie de ataques en el país durante los últimos meses, y ha instado a los afganos a erradicar los "santuarios" de milicianos.Con motivo de estos ataques, a principios de este mes Islamabad cerró temporalmente los principales puntos de paso a lo largo de la línea fronteriza de Durand, constituída en 1893 y rechazada por Kabul. Afganistán, por su parte, ha acusado a Pakistán de hacer la vista gorda con los talibán afganos, así como apoyar al grupo miliciano, algo que Islamabad niega.
El general Bajwa ha dicho que Pakistán está trabajando en proyectos para desarrollar un mecanismo bilateral de seguridad con Afganistán.
"Una frontera mejor gestionada, segura y pacífica va en interés mutuo de dos países hermanados que han tenido que sacrificarse en una guerra contra el terrorismo", ha añadido Bajwa.
Pakistán alberga desde hace tiempo ambiciones para sellar su frontera, que carece de patrullas de control y es montañosa en muchos tramos. En 2007, el Ejército dijo que estaba vallando y minando un tramo de 35 kilómetros de frontera en la región de Waziristán del Norte, en las Zonas Tribales de Administración Federal (FATA), para evitar que los milicianos crucen el terreno escabroso.
Los esfuerzos para establecer una presencia permanente en la frontera han enojado a Kabul. El año pasado, el intento de Pakistán de construir una barrera en el cruce principal de Torjam terminó en escaramuzas transfronterizas.
En las últimas semanas, se han producido al menos dos ataques de aviones no tripulados estadounidenses contra milicianos paquistaníes en el lado afgano de la frontera.