WASHINGTON, 25 Sep. (EUROPA PRESS) -
El Papa Francisco habla de "vergüenza" al referirse a los casos de abusos a menores cometidos por miembros de la Iglesia, durante su primera homilía en la ciudad estadounidense de Nueva York, que ha tenido lugar este jueves en la Catedral de San Patricio ante sacerdotes y consagrados.
"Sé que ustedes como cuerpo presbiteral recientemente han sufrido mucho a causa de la vergüenza provocada por tantos hermanos que han herido y escandalizado a la Iglesia en sus hijos más indefensos", ha denunciado el Sumo Pontífice ante los religiosos, a los que ha dicho acompañar "en este tiempo de dolor y dificultad".
Francisco ha señalado que la "bella Catedral de San Patricio", situada en la Quinta Avenida de Manhattan, es "símbolo del trabajo de generaciones de sacerdotes, religiosos y laicos americanos que han contribuido a la edificación de la Iglesia en Estados Unidos".
En esta exclusiva zona de Nueva York, el Papa ha pedido a los sacerdotes que "no caigan en la trampa" de medir los esfuerzos apostólicos "con criterios de eficiencia, de la funcionalidad y del éxito externo, que rige el mundo de los negocios".
"El verdadero valor de nuestro apostolado se mide por el que tiene a los ojos de Dios. Ver y valorar las cosas desde la perspectiva de Dios exige que volvamos constantemente al comienzo de nuestra vocación y --no hace falta decirlo-- exige una gran humildad", ha agregado.
En este sentido, asegura que hay "una forma distinta de medir el éxito". "A nosotros nos corresponde sembrar, y Dios ve los frutos de nuestras fatigas. Si alguna vez nos pareciera que nuestros esfuerzos y trabajos se desmoronan y no dan fruto, tenemos que recordar que nosotros seguimos a Jesucristo, cuya vida, humanamente hablando, acabó en un fracaso: en el fracaso de la cruz", apostilla el Pontífice.
AGRADECIMIENTOS A LAS RELIGIOSAS DE EEUU
Durante su discurso, el Papa ha expresado su "admiración" y "gratitud" a las religiosas de Estados Unidos, a las que se ha referido como "mujeres fuertes y luchadoras". "A ustedes, religiosas, hermanas y madres de este pueblo, quiero decirles gracias", ha señalado Francisco, que insiste en que su "espíritu de coraje" las sitúa "en la primera línea del anuncio del Evangelio".
"¿Qué sería de la Iglesia sin ustedes?", se ha preguntado el Pontífice, al tiempo que destaca los "grandes sacrificios" y la "caridad heroica" que han realizado los religiosos en el país norteamericano. Entre ellos, destaca a Santa Isabel Ana Seton, cofundadora de la primera escuela católica gratuita para niñas en los Estados Unidos.
"La alegría de los hombres y mujeres que aman a Dios atrae a otros; los sacerdotes y los consagrados están llamados a descubrir y manifestar un gozo permanente por su vocación", añade el Papa, que pide a los presentes en su homilía que no dejen que disminuya su espíritu de sacrificio. "Eso nos aleja de las personas que sufren la pobreza material y se ven obligadas a hacer sacrificios más grandes que los nuestros, sin ser consagrados", ha concluido.