MADRID 3 Dic. (EUROPA PRESS) -
El Parlamento de la región de la república de Abjasia, independiente 'de facto' de Georgia con el apoyo de Rusia, ha rechazado este martes ratificar la ley que fomenta las inversiones rusas en la zona y que ha estado en el centro de la última ola de protestas que a azotado a la región y que ha llevado a la dimisión del presidente, Aslan Bzhania.
Más de una veintena de diputados ha votado en contra del acuerdo con Rusia, mientras que dos se han abstenido de un total de 35 que conforman la Cámara Baja. La votación ha tenido lugar después de que la oposición haya reiterado la importancia de dar marcha atrás y retirar la ley por considerar que esta podría provocar un aumento de los precios de las viviendas y suponer un riesgo para las pequeñas y medianas empresas de Abjasia.
La medida ha salido adelante después de que varios diputados hayan presentado una apelación ante el presidente del Parlamento, Lasha Ashuba. En el documento, han afirmado que retirar la medida "reduciría la confrontación socio-política y garantizaría que las próximas elecciones se celebren en una atmósfera de calma".
El acuerdo fue firmado el pasado 30 de noviembre por el ministro de Economía de Rusia, Maxim Reshetnikov, y la jefa de la cartera homóloga abjasia, Kristina Ozgan, según informaciones recogidas por medios de comunicación locales.
Las autoridades abjasias defendieron entonces que este acuerdo buscaba atraer la inversión rusa para lograr un mayor crecimiento de la economía de la zona, si bien muchos han arremetido contra el pacto por considerar que favorecerá una mayor influencia de Rusia.
ASALTO AL PARLAMENTO
Estaba previsto que el Parlamento ratificara este acuerdo el pasado 15 de noviembre, si bien la sesión tuvo que ser cancelada debido a que la oposición convocó una serie de protestas que derivaron en el asalto por parte de los manifestantes al Parlamento y varias oficinas gubernamentales, así como la posterior dimisión del presidente.
Los manifestantes exigieron entonces una nueva sesión parlamentaria para lograr la retirada de la medida, que ha sido ahora rechazada, mientras que el Parlamento ya aprobó la semana pasada una nueva convocatoria electoral para el 15 de febrero, cuando la población podrá elegir al nuevo presidente.
Georgia y Rusia mantuvieron una breve guerra por Osetia del Sur y la región de Abjasia en 2008. Tras acabar el conflicto, Moscú, cuyas fuerzas se impusieron, reconoció a ambas regiones como países independientes, si bien la inmensa mayoría de los países no lo han hecho y el Gobierno georgiano sigue considerándolas regiones autónomas bajo su propia soberanía. Actualmente, militares rusos y abjasios garantizan la seguridad en la región.
Estaba previsto que las elecciones, convocadas de forma anticipada, se celebraran el próximo mes de febrero dado que el plazo estipulado por la legislación abjasia daba de plazo hasta el día 19 de dicho mes.