BERLÍN, 23 Oct. (DPA/EP) -
El Parlamento alemán celebra este martes la sesión inaugural del nuevo periodo legislativo, un acontecimiento marcado por la firma de la canciller, Angela Merkel, de su cuarto mandato consecutivo y por la irrupción en la cámara en más de medio siglo del primer partido de ultraderecha, Alternativa para Alemania (AfD).
Las críticas del Bundestag al partido ultraderechista provocaron un cambio legislativo en junio sobre el diputado que tiene el honor político de abrir la sensión constitutiva del Parlamento. Esta función era realizada por el diputado de más edad, pero las formaciones han impulsado un cambio ante el temor de que el miembro de AfD Wilhem von Gottberg, de 77 años, cumpliese los requisitos.
La nueva norma establece que la apertura de la cámara corresponde a aquel diputado que haya ocupado un escaño durante más tiempo. El actual ministro de Finanzas alemán, Wolfang Schauble, debería realizar esta labor por sus 45 años en un asiento parlamentario, pero su nombramiento como presidente de la cámara se lo impide, por lo que relega los honores al político liberal Otto Solms.
Además de impedir que el partido xenófobo abra la sesión constituyente, las formaciones tradicionales se han esforzado desde un primer momento por marcar distancias y evitar sentarse cerca de la bancada de AfD, que ha aterrizado en el Parlamento con 90 diputados, comandados por Alexander Gauland y la economista Alice Weidel.
El décimo noveno Parlamento desde la creación de la República Federal de Alemania en 1949 se presenta como el de mayor tamaño y como uno de los más fragmentados de la historia. La nueva cámara tendrá un total de 709 diputados, frente a los 631 de la legislatura precedente, y contará con seis formaciones políticas, algo que no ocurría desde 1957.
Además, será un Parlamento de marcado carácter masculino en el que las mujeres tan solo representan el 30,7 por ciento.