El Parlamento de Irak aprueba los controvertidos Presupuestos para 2023-2025 tras cuatro días de sesiones

MADRID, 12 Jun. (EUROPA PRESS) -

El Parlamento de Irak ha aprobado este lunes los controvertidos Presupuestos para el periodo 2023-2025 tras cuatro días de reuniones y disputas políticas, especialmente en torno al reparto de los beneficios por la exportación de petróleo entre el Gobierno central y las autoridades de la región semiautónoma del Kurdistán iraquí.

"La Cámara de Representantes ha aprobado en su 31 sesión (...) y en presencia de 229 diputados el proyecto de ley sobre los Presupuestos federales de Irak para los años 2023, 2024 y 2025", ha indicado el Parlamento iraquí en un comunicado publicado a través de su página web.

La confirmación ha llegado después de que el Parlamento reiniciara sus sesiones a última hora del domingo para votar los últimos artículos que quedaban pendientes, en medio de las disputas entre el Partido Democrático del Kurdistán (KDP) y la Unión Patriótica del Kurdistán (PUK).

Los Presupuestos incluyen un gasto récord de 152.000 millones de dólares (cerca de 141.000 millones de euros), con un 12,6 por ciento destinado a la región semiautónoma del Kurdistán iraquí. El elevado techo de gasto ha provocado preocupaciones por una posible inestabilidad si el precio del petróleo cae por debajo de los 70 dólares por barril fijados en el proyecto.

Asimismo, las principales discrepancias han girado en torno al artículo sobre la gestión de los ingresos del petróleo en la región semiautónoma, incluida una cláusula que apunta que, en caso de disputa, un comité conjunto se reunirá en un plazo de 30 días para encontrar una solución, según ha recogido la cadena de televisión kurda Rudaw.

Las autoridades centrales y las de la región semiautónoma firmado en marzo un acuerdo para reiniciar las exportaciones de petróleo desde el Kurdistán iraquí, en el marco de una disputa entre Bagdad y Ankara que llevó a una suspensión de este flujo a los mercados internacionales, que aún no se ha retomado.

La representante especial para Irak de la Secretaría General de Naciones Unidas, Jeanine Hennis-Plasschaert, pidió durante el fin de semana en nombre de la comunidad internacional al Gobierno de Bagdad la adopción inmediata de un presupuesto federal como prolegómeno de una reforma económica que aborde las preocupaciones de la población referidas al mal reparto de los beneficios del crudo, el exceso de burocracia y las casi permanentes sospechas de corrupción sobre las autoridades.