VIENA, 10 Jul. (Reuters/EP) -
Irán y el Grupo 5+1 --formado por Estados Unidos, Reino Unido, Francia, Alemania, Rusia y China-- han sugerido que las negociaciones sobre el programa nuclear iraní se prolongarán más allá de esta medianoche, cuando expira el plazo para llegar a un acuerdo definitivo.
"Estamos haciendo progresos, pero son dolorosamente lentos", ha dicho el ministro de Exteriores de Reino Unido, Philip Hammond, en declaraciones a los medios de comunicación desde Viena, sede de las conversaciones a siete bandas.
Hammond ha revelado que los negociadores se reunirán de nuevo este sábado "para ver si pueden superar los obstáculos persistentes". "Aún hay temas por resolver, pero confío en que nuestro trabajo de las próximas 12 horas consiga aclarar algo más el texto", ha indicado.
El jefe de la diplomacia alemana, Frank Walter Steinmeier, ha apuntado en la misma dirección, explicando que, si bien "las negociaciones son muy intensas", "el diablo está absolutamente en los detalles". "Espero que en los próximos días podamos llegar a un punto" en común, ha confiado.
El secretario de Estado de Estados Unidos, John Kerry, ya avisó a última hora del jueves de que hay "progresos reales" pero que las partes han decidido "no apresurarse". No obstante, advirtió de que "no vamos a sentarnos a la mesa de negociaciones para siempre".
"Estamos trabajando duro, pero no de forma apresurada, para hacer el trabajo", dijo por su parte el ministro de Exteriores de Irán, Mohamed Javad Zarif, en Twitter y hoy ha adelantado que seguramente las negociaciones nucleares sigan durante el fin de semana.
FIN DE LAS SANCIONES
En estos momentos el principal obstáculo parece ser la retirada de las sanciones que pesan sobre Irán por las sospechas de la comunidad internacional de que su industria atómica tiene fines militares, algo que Teherán ha negado reiteradamente.
Si bien el levantamiento progresivo de las sanciones estaría prácticamente acordado, el problema radicaría concretamente en el embargo de armas impuesto por el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas al país persa.
Irán considera que la prohibición de importar armas convencionales debe derogarse inmediatamente. Sin embargo, Occidente teme que el fin del embargo de armas se traduzca en una escalada de violencia en la región, ya que el país interviene directamente en la guerra civil siria y ejerce una gran influencia sobre el conflicto yemení.
EN MANOS DE OCCIDENTE
Así las cosas, el primer vicepresidente iraní, Eshaq Jahangiri, ha trasladado toda la responsabilidad a las cesiones que estadounidenses y europeos estén dispuestos a hacer en las negociaciones nucleares, según ha informado la agencia de noticias Tasnim.
"Creemos que si Occidente cede en sus excesivas demandas, podremos llegar a un buen acuerdo definitivo", ha afirmado, al tiempo que se ha mostrado consciente de que "cuando más se acercan los últimos momentos, más difícil es tomar decisiones".