MADRID, 2 Jun. (EUROPA PRESS) -
Al menos 1,3 millones de niños necesitan asistencia humanitaria urgente en toda la región de la Bahía de Bengala como consecuencia de la devastación dejada a su paso por el ciclón 'Mora' en Birmania y Bangladesh y las torrenciales lluvias de monzón en Sri Lanka, según ha alertado este viernes el Fondo de la ONU para la Infancia (UNICEF).
"Los niños que han sido víctimas de tormentas brutales, inundaciones y deslizamientos de tierra, ahora están amenazados por la falta de agua potable, servicios inadecuados de higiene y acceso limitado a la atención médica", ha explicado el director de Programas de Emergencia de UNICEF, Manuel Fontaine.
"Debemos actuar rápidamente para garantizar que los servicios y suministros estén en su lugar para mantener a los niños seguros y para detener la propagación de enfermedades transmisibles como la diarrea, el cólera o las infecciones respiratorias", ha subrayado.
La agencia de la ONU ha expresado su particular preocupación por los niños y las familias que ya estaban desplazados y que vivían en condiciones precarias antes de que llegara el mal tiempo, incluidos los 74.000 refugiados rohingya llegados a Bangladesh y los 120.000 desplazados en el estado birmano de Rajine.
"La triste realidad es que estos niños han sido golpeados por una doble crisis humanitaria", ha destacado Fontaine. "Los niños rohingya desplazados en Birmania y Bangladesh, por ejemplo, en muchos casos ya estaban luchando por acceder a los servicios esenciales incluso antes de la tormenta", ha añadido.
Según el responsable de UNICEF, "es imperativo que lleguemos a estos grupos vulnerables y excluidos, así como a aquellos que viven en comunidades pobres, que serán mucho más susceptibles a las consecuencias de estas tormentas, con el apoyo que necesitan".
UNICEF ha resaltado que la destrucción causada por las tormentas en cada uno de los tres países ha sido brutal. En el caso de Bangladesh, el paso del ciclón ha afectado a 2,8 millones de personas, mientras que en Sri Lanka las inundaciones por las fuertes lluvias han afectado hasta ahora a más de 631.000 personas, desplazando al menos a 77.000.
En Bangladesh, la agencia de la ONU y sus socios han distribuido suministros pre-posicionados en las áreas fuertemente golpeadas de Cox's Bazar y Chittagong, incluyendo kits de higiene, tabletas de purificación de agua, cubos de plástico, apoyos de plástico para letrinas y lonas para aproximadamente 11.000 personas.
En el caso de Birmania, se han realizado evaluaciones para recopilar información sobre daños y necesidades en los estados de Rajine y Chin y además UNICEF ha pre-posicionado cubos de plástico, mesas de purificación de agua y lonas y está trabajando para proveer provisiones para adaptar los espacios temporales de aprendizaje al comienzo del año escolar recién inaugurado.
Por último, en Sri Lanka se ha procedido a la distribución de 1.260 bidones de 10 litros, 1.000 lonas y 100.000 pastillas de purificación de agua a las comunidades afectadas, y apoyo a los esfuerzos gubernamentales para proteger a los niños.