RIAD 14 Nov. (Reuters/EP) -
El patriarca de la Iglesia Maronita de Líbano, Beshara al Rai, ha mantenido este martes reuniones por separado con el rey Salman y con el primer ministro dimisionario de Líbano, Saad Hariri, en el marco de una histórica visita al país vecino que llega en un momento en el que el Gobierno de Beirut sospecha que Hariri presentó su renuncia por las presiones de las autoridades de Riad.
El patriarca maronita, que inició su visita el lunes, tiene previsto reunirse también con el príncipe heredero saudí, Mohamed bin Salman, que ha impulsado una serie de reformas económicas profundas y que se ha comprometido a relajar las estrictas normas sociales que tiene el país para aproximarse a un islam "moderado" y "abierto" al mundo y a todas las religiones, tradiciones y pueblos.
Una visita oficial al reino saudí de un líder religioso no musulmán es un gesto poco habitual por parte de Arabia Saudí, un país que alberga los lugares más sagrados para la religión musulmana y que no permite la práctica en lugares públicos de otros credos religiosos, lo que provoca que los cristianos se reúnan para rezar en domicilios privados.
El patriarca maronita, Beshara al Rai, es el líder de la Iglesia Maronita, que tiene presencia en Líbano, Siria y Chipre y que sigue el rito oriental de la Iglesia Católica romana. Acompañado por clérigos católicos ataviados con hábitos religiosos y grande cruces doradas, Al Rai ha discutido con el rey Salman sobre tolerancia religiosa y la lucha contra el extremismo, según ha informado la agencia de noticias saudí SPA.
El patriarca maronita también se ha reunido con Saad Hariri, que presentó su renuncia como primer ministro de Líbano el 4 de noviembre desde Arabia Saudí y que, desde entonces, no ha regresado al país de los cedros. Hariri justificó su dimisión por un supuesto plan para asesinarle y acusó a Irán y al partido-milicia chií libanés de estar intentando desestabilizar la región.
El príncipe heredero saudí, hijo de 32 años de edad del rey Salman, ha puesto en marcha una línea política más dura con respecto a Irán desde que asumió la cartera de Defensa hace dos años. Además ha impulsado reformas de carácter social en un país que profesa el wahabismo, una corriente extremadamente conservadora del islam suní.
Al Rai es el segundo patriarca cristiano que visita Arabia Saudí tras el viaje que realizó en 1975. El viaje actual estaba planeado antes de la actual crisis político y responde a una invitación cursada por el reino saudí en 2013.