Maduro, Ortega y Díaz-Canel aún no han confirmado si se sumarán a la cita iberoamericana en Antigua
MADRID, 14 Nov. (EUROPA PRESS) -
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, llegará este miércoles a Guatemala para participar en la XXVI Cumbre Iberoamericana, la primera desde que ocupa la Moncloa, en un contexto de marcada tensión regional por las crisis en Venezuela y Nicaragua.
La Cumbre de este año, que se reúne a nivel de mandatarios el jueves y el viernes, destaca por la alta asistencia de jefes de Estado y de Gobierno, un total de 17 de los 22 países latinoamericanos e ibéricos que componen la comunidad iberoamericana.
La Secretaria General Iberoamericana, Rebeca Grynspan, ha valorado que la cita en Antigua ofrecerá la primera oportunidad de encuentro de los nuevos líderes iberoamericanos, ya que desde la última diez países han cambiado de Gobierno (España, Ecuador, Chile, Cuba, Colombia, Costa Rica, Panamá, Perú, México y Brasil).
En vísperas de que arranque el cónclave de jefes de Estado y de Gobierno, aún se desconoce si asistirán los presidentes de Cuba, Miguel Díaz-Canel; Venezuela, Nicolás Maduro; o Nicaragua, Daniel Ortega; que acaparan la atención internacional.
Para Díaz-Canel, que regresa de una intensa gira internacional, sería también su primera Cumbre Iberoamericana, ya que ascendió al cargo el pasado mes de abril en una transición histórica del poder en Cuba que puso fin a la era de los hermanos Castro.
Ortega, por su parte, anunció hace meses su intención de acudir al foro bienal, pero no lo ha confirmado. En abril, estallaron las peores protestas de sus quince años de Gobierno, que fueron duramente reprimidas por las fuerzas de seguridad dejando más de 300 muertos.
El 9 de noviembre, el ministro de Asuntos Exteriores español, Josep Borrell, se mostró partidario de que la comunidad internacional imponga sanciones a la "dictadura" que lidera Ortega, un duro mensaje contra el presidente nicaragüense tras la represión de las manifestaciones contra el Gobierno.
Maduro es otra incógnita. Sin embargo, en septiembre se presentó por sorpresa en la Asamblea General de Naciones Unidas para contar "la verdad" de lo que ocurre en Venezuela, sumida en una crisis política y económica que ya ha expulsado a tres millones de personas.
Sánchez recuperará la presencia española con un jefe de Gobierno, después de la excepción de la Cumbre Iberoamericana de 2016, celebrada en Cartagena de Indias (Colombia), de la que Mariano Rajoy se ausentó a causa de las gestiones para formar Gobierno.
Junto al presidente estarán Felipe VI, que ya ha estado en varias cumbres iberoamericanas como Príncipe de Asturias y monarca, y el ministro de Exteriores, Josep Borrell, que han llegado desde Perú, donde los Reyes han hecho su primera visita de Estado en diez años.
Según fuentes de Moncloa, Sánchez aprovechará para conocer a los mandatarios latinoamericanos con los que aún no se ha visto, como parte de su estrategia para reivindicar la región como una prioridad de la política exterior española.
Además, de acuerdo con las mismas fuentes, buscará enfatizar el concepto de comunidad iberoamericana, casi con un significado de "familia", como un espacio destinado a subrayar los lazos comunes pese a las diferencias políticas entre sus estados miembro.
UNA AGENDA INTENSA
La agenda de Sánchez comenzará el jueves con un almuerzo con el presidente saliente de México, Enrique Peña Nieto, al que también asistirá el Rey.
Ambos intervendrán después en el XII Encuentro Empresarial Iberoamericano, que ha sumado a más de 600 empresas, siendo las españolas las más numerosas después de las guatemaltecas.
A continuación, el jefe del Gobierno español acompañará a Grynspan en la presentación del Convenio Ibercampus y Becas de la Fundación Carolina y la Secretaría General Iberoamericana (SEGIB).
Esta primera jornada concluirá con la cena de bienvenida ofrecida por el presidente guatemalteco, Jimmy Morales, a sus homólogos, en la que estarán tanto Sánchez como el Rey.
Ya el viernes, los dos ofrecerán el tradicional desayuno con los presidentes centroamericanos y el presidente dominicano, Danilo Medina. En el caso de que Ortega acuda a la Cumbre Iberoamericana, también acudirá.
Inmediatamente después empezará la Cumbre de Jefes de Estado y de Gobierno, con dos sesiones de trabajo entre las que mediará un "almuerzo retiro" en el que se quedarán solos, sin sus equipos y sin cobertura mediática.
En las sesiones plenarias, los presidentes intervendrán en turnos sucesivos sin que haya una agenda establecida, de modo que podrán abordar los temas que sean de su interés, pudiéndose dar la réplica y entablar un debate si así lo consideran.
CONVERSACIONES RESERVADAS
Este formato, tal y como explicó la semana pasada en un acto de presentación en Madrid el secretario de Estado de Cooperación Internacional y para Iberoamérica y el Caribe, Juan Pablo de Laiglesia, permitirá a los presidentes hablar con "absoluta libertad".
Así, aunque la Cumbre Iberoamericana de Antigua tiene como objetivo encontrar la forma de aplicar la Agenda 2030 a ambos lados del océano Atlántico, bajo el lema 'Una Iberoamérica próspera, inclusiva y sostenible', podrían tratarse otros muchos temas.
Además de la situación de los Derechos Humanos en Venezuela y Nicaragua, que algunos líderes latinoamericanos ya han anunciado que pondrán sobre la mesa, otro de los asuntos que sobrevuela al Cumbre Iberoamericana es la caravana de migrantes centroamericanos.
Miles de personas marchan en estos momentos por territorio mexicano hacia Estados Unidos, cuyo presidente, Donald Trump, ha ordenado un despliegue militar sin precedentes en la frontera ante lo que considera una "emergencia nacional".
La cuestión migratoria está incorporada en el debate 'Migración y Desarrollo' que, según recordó De Laiglesia, siempre ha estado en la agenda de cooperación iberoamericana, si bien no cabe esperar un resultado concreto.
REUNIONES BILATERALES
Al margen de los actos oficiales, Sánchez espera poder reunirse a nivel bilateral con algunos presidentes. Fuentes de Moncloa han avanzado que todos los mandatarios centroamericanos que han confirmado asistencia a la cita en Antigua han solicitado un cara a cara con su par español, si bien por ahora no hay nada cerrado.
El Rey, en cambio, ya tiene en agenda reuniones con los presidentes de Guatemala, Jimmy Morales, y Paraguay, Mario Abdo Benítez, durante la mañana del jueves (hora local).
La Cumbre Iberoamericana culminará con la emisión de tres documentos: la declaración final, basada en la Agenda 2030 de Desarrollo Sostenible; los comunicados especiales, en los que se reflejan los intereses nacionales; y la planificación interanual para el periodo 2019-2022.
España emitirá un comunicado propio sobre empleo digno y copatrocinará uno con Bolivia sobre el derecho al agua, otro con Argentina sobre el Congreso de la Lengua Española y otro con Portugal y Chile sobre el quinto centenario de la vuelta al mundo de Magalles y Elcano.
Sánchez pondrá fin a su participación en la Cumbre Iberoamericana con una rueda de prensa prevista para el viernes a las 17.00 (medianoche del sábado en España) en el Centro de Formación de la AECID.