CIUDAD DE PANAMÁ 20 Oct. (de la enviada especial de EUROPA PRESS, Beatriz Fernández) -
El presidente de México, Enrique Peña Nieto, ha abandonado Panamá antes de que terminara la XXIII Cumbre Iberoamericana, a pesar de que su país será la sede de la próxima cumbre y, por tanto, el encargado de organizar el contenido de la reunión.
Como anfitrión de la próxima cumbre, Peña Nieto debía comparecer en rueda de prensa junto al anfitrión de este año, el presidente panameño, Ricardo Martinelli; el del año anterior, Mariano Rajoy, y el secretario general iberoamericano, Enrique Iglesias.
La llamada 'cumbre de la renovación' ha batido récord de ausencias (han faltado 12 mandatarios), no ha contado con ningún líder de izquierdas y se ha cerrado sin acuerdos sustanciales, salvo la decisión de espaciar más estas citas, que a partir de 2014 serán bienales.