MÉXICO DF, 23 Sep. (EUROPA PRESS) -
La Secretaría de Gobernación (Segob) a través del subsecretario de Derechos Humanos, Roberto Campa Cifrián, ha informado que el presidente, Enrique Peña Nieto, se reunirá este jueves con los padres de los 43 'normalistas' de Ayotzinapa desaparecidos hace un año en la localidad Iguala (Guerrero) y ha presentado la agenda prevista para dicho encuentro.
Así, se abordarán cuatro aspectos: "el primero tiene que ver con la búsqueda, el segundo tiene que ver con investigación, el tercero tiene que ver con atención a víctimas y el cuarto con política pública". "Son éstos los cuatro temas principales que van a ser revisados en la reunión", ha indicado Campa Cifrián.
Este encuentro tiene lugar después de que el Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes (GIEI) de la CIDH recomendase en un informe una nueva peritación, tras concluir que es "poco probable" que los cuerpos de los 43 'normalistas' fueran incinerados en el basurero de Cocula, tal como sostiene la versión oficial.
El funcionario mexicano ha informado este martes al Senado de la temática del diálogo y ha afirmado que el encuentro "muestra la apertura (de Peña Nieto) para llevar a cabo una reunión constructiva, que cumpla las expectativas, para el bien de los padres de los normalistas y de México", tal y como publica el diario local 'Excelsior'.
CASO IGUALA
El 26 de septiembre del 2014, un centenar de estudiantes pertenecientes a la escuela de magisterio rural de Ayotzinapa llegaron a Iguala, en el estado de Guerrero, para apoderarse de autobuses que iban a utilizar para acudir a una protesta en la capital, cuando fueron atacados a tiros por policías municipales y sicarios.
Tres murieron en durante las primeras horas del ataque, mientras que los restos calcinados de otro más fueron hallados más tarde e identificados. Los otros 42 continúan desaparecidos.
Los familiares de los jóvenes nunca dieron credibilidad a las conclusiones del entonces fiscal Jesús Murillo, que según abogados conocedores del caso trató de cerrar el caso cuanto antes porque perjudicaba al Gobierno.
Uno de los aspectos fundamentales es esclarecer qué papel jugaron esa noche la Policía Federal y el Ejército, que estaban al tanto de los movimientos de los estudiantes, pero no intervinieron para impedir el ataque contra los jóvenes desarmados y en pleno centro de la ciudad. Al parecer una patrulla de la Policía Federal llegó a detener uno de los autobuses en los que se desplazaban los estudiantes.