WASHINGTON 26 Sep. (Reuters/EP) -
El Departamento de Defensa de Estados Unidos ha admitido este lunes que los milicianos del grupo terrorista Estado Islámico están "decididos" a utilizar su armamento químico y previsiblemente harán uso de él para intentar frenar el avance de las tropas iraquíes sobre la ciudad de Mosul.
La semana pasada, un proyectil con posibles sustancias químicas aterrizó cerca de la base de Qayyara, a unos cientos de metros de donde las fuerzas de Estados Unidos intentan preparar un aeródromo para ayudar a las de Irak en su inminente ofensiva.
Un portavoz del Pentágono, Jeff Davis, ha explicado ante los medios que el análisis del proyectil dio positivo para gas mostaza en un primer momento, pero dos pruebas posteriores no fueron concluyentes. El artefacto está siendo sometido a nuevos análisis.
"Reconocemos que es algo que Estado Islámico ya ha hecho antes, muchas veces. Hay al menos un par de decenas de veces en las que sabemos que han lanzado municiones improvisadas con gas mostaza", ha afirmado Davis.
El portavoz ha matizado que hasta ahora la capacidad de Estado Islámico de convertir en armas este químico ha sido bastante rudimentaria y no ha existido un riesgo de "concentración letal". En este sentido, y a pesar de que es "militarmente significativo", ha apuntado que se trata de algo "más irritante que otra cosa".
"Reconocemos que es (una amenaza) real. Están decididos. Les encantaría ser capaces de usar armas químicas contra nosotros, contra los iraquíes", ha añadido Davis, quien ha prometido que Estados Unidos hará "todo lo posible" para prepararse ante riesgos de este tipo. A las labores de formación se ha sumado también el reparto de más de 50.000 máscaras de gas, 40.000 de las cuales han ido a parar a manos de las fuerzas de seguridad iraquíes.