MADRID, 28 Jun. (EUROPA PRESS) -
El Pentágono ha informado este martes que el fallo del Tribunal Supremo estadounidense que revoca el derecho constitucional al aborto no afectará a las políticas existentes en el Departamento de Defensa, aunque limitará estos servicios para sus empleados y familias en las instalaciones militares.
Al ser entidades federales, los recintos militares seguirán pudiendo recurrir a servicios para practicar abortos de forma limitada, en casos de violación, incesto o cuando la vida de la madre esté en peligro.
No obstante, la ley federal prohíbe que el Pentágono realice o pague otro tipo de medidas más amplias relacionadas con estos servicios, afirma un memorando enviado por el subsecretario de Defensa, Gil Cisneros, tal y como ha recogido la cadena NBC News.
El texto reconoce, no obstante, que es posible que los miembros de servicio, los empleados civiles y el personal del Pentágono, así como sus familias vean limitadas sus opciones para abortar según el fallo, especialmente a aquellas personas que residan en estados donde el aborto sea completamente ilegal, tal y como ha recogido Bloomberg.
"Nada es más importante que la salud y el bienestar de nuestros miembros del servicio, la fuerza laboral civil y las familias del Departamento de Defensa, y estamos comprometidos a cuidar a toda nuestra gente y garantizar que toda la fuerza permanezca lista y resistente", ha dicho Cisneros, según la citada agencia.
El fallo tampoco afecta a las políticas del Departamento de Defensa con respecto a los viajes para abortar. Sus miembros podrán viajar para realizar abortos, cubiertos por el Gobierno, o hacerlo por su cuenta, según ha recogido el memorando.
El Tribunal Supremo de Estados Unidos revocó el derecho constitucional al aborto en el país tras anular, tal y como se filtró a principios de mes, el fallo Roe contra Wade que reconoció por primera vez el derecho de las mujeres al aborto sin restricciones durante el primer trimestre del embarazo, un precedente legal que se llevaba usando en el país desde 1973.
La decisión fue adoptada con el voto a favor de los seis jueces conservadores y el rechazo de los tres magistrados liberales del alto tribunal. Esta medida da vía libre a los estados para prohibir o restringir el aborto.