El periodista turco Kerim Balci denuncia la represión del Gobierno contra los medios críticos

El periodista turco Kerim Balci, director de 'Turkish Review'
EUROPA PRESS
Actualizado: martes, 5 abril 2016 16:17

Asegura que no quedan medios críticos "convencionales" y que Erdogan es un "demócrata" que ejerce como "dictador"

MADRID, 5 Abr. (EUROPA PRESS) -

El periodista Kerim Balci, director de la revista 'Turkish Review', ha denunciado la campaña de represión del Gobierno de Ankara contra todos los periodistas y medios de comunicación que son críticos con su gestión, al tiempo que ha pedido ayuda a la comunidad internacional para detener esta deriva contra la libertad de prensa.

En una rueda de prensa organizada en Madrid por Reporteros Sin Fronteras (RSF) y la Federación de Asociaciones de la Prensa de España (FAPE), Balci ha dicho que el Ejecutivo de Turquía "tiene odio a todos los periodistas" y ha denunciado las prácticas contra los medios impulsadas por el propio presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, con situaciones como cuando llamó desde Túnez al administrador de una cadena de televisión para que quitara de la emisión de la cadena un subtítulo porque hacía referencia a un dirigente opositor.

Balci está en paro porque su publicación forma parte del grupo mediático del diario 'Zaman', cuyo control ejerce desde marzo un administrador impuesto por un tribunal y que ya se ha encargado de cambiar la línea editorial, provocando una grave caída de ventas del periódico.

El periodista ha relatado las maniobras y "estrategias" del Ejecutivo para hacerse con el control de los medios de comunicación que son críticos con su gestión e impedir el trabajo de sus reporteros.

LA PRIMERA INCAUTACIÓN DE UN GRUPO MEDIÁTICO EN 2004

Así, ha asegurado que la primera incautación de un grupo mediático por parte del Gobierno tuvo lugar en 2004 y que entonces muchos periodistas y medios respaldaron la decisión del Ejecutivo porque el grupo corría el riesgo de entrar en bancarrota y dejar sin pagar los salarios de sus trabajadores.

Posteriormente, el Gobierno fue aumentando sus acciones para tomar el control de grupos mediáticos que no le eran afines, hasta que en marzo de este año logró hacerse con el control del grupo del periódico 'Zaman', el diario más vendido del país con una tirada de 650.000 ejemplares y que ahora, tras el cambio de línea editorial, vende unos 5.000 ejemplares.

Balci ha dicho que, además de la "represión" contra la prensa, el mayor problema de libertad de prensa que tiene Turquía en la actualidad es la "cohesión" entre la postura de los medios progubernamentales y la del Ejecutivo, que no deja apenas espacio para la crítica.

PRISIÓN POR CRITICAR AL GOBIERNO EN EL EXTRANJERO

El periodista turco ha contado que él mismo se expone a ser juzgado y condenado a una pena de hasta seis años y medio de prisión en Turquía solo por criticar públicamente al Gobierno desde otro país con su comparecencia en Madrid de este martes y que ya está acusado en un proceso judicial de ser "espía del Mossad" porque cursó estudios en una universidad israelí representando a su medio.

Balci ha hecho un relato pormenorizado sobre varias operaciones y maniobras del Ejecutivo contra medios de comunicación críticos, citando procesos judiciales o el caso de una sanción multimillonaria que obligó a un empresario mediático a vender varios diarios y a ceñirse con los restantes a la línea oficial que pretenden las autoridades.

También ha asegurado que el Ejecutivo utiliza la política de acreditaciones de periodistas para premiar a los que le son afines y censurar a los críticos y ha contado que los profesionales que, como él, se niegan a solicitar al Ejecutivo una acreditación no constan en los registros como periodistas porque las autoridades no los reconocen así.

Balci ha dicho que nunca ha pedido la acreditación porque cree que no debe ser el Ejecutivo quien la conceda sino una institución independiente y porque no está de acuerdo con algunos privilegios asociados a esas tarjetas como la gratuidad en el uso de transportes públicos.

En este sentido, ha denunciado que el Gobierno utiliza cada vez más los vuelos de autoridades con periodistas para dar solo los "titulares" en pleno vuelo a los reporteros a los que ha "acreditado", dejando a los críticos, que no van en la aeronave, sin esas informaciones.

LOS PERIODISTAS "EXILIADOS" NO SE COMPUTAN

Balci ha mostrado sus dudas en cuanto a las estadísticas sobre la situación de periodistas que elaboran algunas organizaciones internacionales por considerar que hay muchos periodistas que se han "exiliado" del país y no aparecen en esos registros y también porque el Gobierno solo considera como profesionales a aquellos a los que ha concedido su acreditación.

En este contexto, ha afirmado que el Ejecutivo también busca favorecer a los periodistas leales con prácticas como invitarles a dar conferencias que se pagan con cantidades que llegan a las 5.000 liras turcas, el equivalente a su "antiguo sueldo de un mes" como periodista. A esas charlas, según ha subrayado, nunca se invita a periodistas "críticos" con el Gobierno, solo a afines.

ERDOGAN EL "DEMOCRATADOR"

Balci ha definido al presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, como un "democratador", un dirigente que llega al poder como "demócrata" pero lo ejerce como un "dictador" y ha incluido en la misma categoría al mandatario ruso, Vladimir Putin, al primer ministro húngaro, Viktor Orban, y el jefe del Gobierno indio, Narendra Modi.

Tras admitir que los periodistas y los medios turcos se dieron cuenta "tarde" de la deriva del Gobierno contra la libertad de prensa, ha hecho un llamamiento a actuar para defender la libertad de expresión y de información en Turquía y ha advertido de que la tendencia podría llegar a otros países.

Preguntado sobre si cree que quedan medios críticos con el Gobierno que puedan trabajar en Turquía, Balci ha considerado que no quedan "medios convencionales" contrarios al Ejecutivo pero ha destacado el trabajo de varios medios digitales formados por periodistas despedidos de medios y que informan libremente.

En cuanto a las posibilidades de recurso judicial que tienen los grupos mediáticos cuyo control ha asumido el Gobierno, Balci ha dicho que se trata de un proceso muy complejo de recursos judiciales a "nivel interno" que se puede prolongar hasta "30 años" para lograr que el recurso llegue al Tribunal Europeo de Derechos Humanos, la única instancia judicial no turca que podría pronunciarse sobre las incautaciones de medios. "Es toda una vida", ha advertido.

El periodista turco ha lamentado el "silencio sepulcral" que mantienen la Unión Europea y Estados Unidos frente a las prácticas contra la libertad de prensa en Turquía y ha alertado del riesgo de que aumente la "xenofobia" en el país tras la aplicación del acuerdo "vergonzoso" para devolver a refugiados a territorio turco, en un momento en el que el país pasa por una difícil situación económica.

También se ha referido a la guerra del Ejército turco contra los milicianos del Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK) en el sureste del país y, tras subrayar que el Gobierno tiene que actuar contra el "grupo terrorista", ha advertido de que la "violencia estatal" en esta región ha provocado el desplazamiento de unas 500.000 personas y solo está generando más terrorismo.

En este contexto, ha recordado que el número de miembros del PKK que han muerto en combates con las Fuerzas Armadas turcas, unos "5.300 milicianos", es mayor que la cifra de terroristas de Estado Islámico fallecidos por los ataques de Estados Unidos en Siria.

Balci ha considerado que la "deriva" del Gobierno turco comenzó en 2009 con dos episodios que él cree significativos, el cese de un jefe de Estado Mayor que se mostró crítico con el Ejecutivo, y el fallo de un tribunal que rechazó ilegalizar al gubernamental Partido de la Justicia y el Desarrollo (AKP).

Entonces, el Ejecutivo entendió que ya no tenía oposición por parte del Ejército y del poder judicial y decidió poner en marcha la "agenda secreta" que tenía desde que alcanzó el poder.