MADRID, 20. Oct (EDIZIONES) -
Los establecimientos de Malasia ya no podrán utilizar el término 'hot dog' para hacer referencia al clásico bocadillo de salchicha, ni tampoco podrán llamar así a los locales de comida rápida. ¿La razón? El término puede llegar a generar cierta "confusión", según ha manifestado el Departamento de Desarollo Islámico del país asiático.
Su directora, Sirajuddin Suhaimee, en declaraciones recogidas por la BBC, asegura que "los perros son considerados impuros en el Islam y su nombre no se puede relacionar con la Certificación Halal" (requisitos que exige la ley islámica para que los productos lleguen a los musulmanes).
La medida ha sido implantada tras las numerosas quejas de turistas musulmanes al llegar a Malasia, un país que siempre se ha caracterizado por aplicar el islamismo de una forma más moderada que en otros lugares.
Las reacciones no se han hecho esperar y son muchos los que han criticado la decisión del Departamento Islámico. Una de los comentarios que más repercusión ha tenido ha sido el de la activista y columnista Marina Mahathir, hija del primer ministro malasio, que afirmó irónicamente: "pobres musulmanes que se confunden y nunca han oído hablar de los perritos calientes".
El ministro de Turismo y Cultura de Malasia, Nazri Aziz, también se ha sumado a las críticas asegurando que la medida es "estúpida y retrógrada" y que él término 'hot dog' no puede resultar ofensivo porque se viene utilizando desde hace años.
De momento, ya hay varios comercios que han tenido que cambiar su nombre oficial. Es el caso de la franquicia 'Pretzel Dog', que desde esta semana ya figura con la denominación 'Pretzel salchicha'.