BANGKOK, 30 Oct. (Reuters/EP) -
Un panel de expertos y estudiantes de la Universidad de Yale ha pedido a Naciones Unidas que investigue las "pruebas contundentes" que existen sobre un genocicio del pueblo Rohingya por las autoridades birmanas que desde 2012 ha provocado el éxodo de 160.000 personas.
"Creemos que hay pruebas claras que apoyan la teoría de que estamos ante un genocicio", ha declarado Katherine Murray, una de las cuatro estudiantes de Yale responsable del estudio sobre la situación en el estado birmano de Rajine.
"El paso siguiente más lógico es que el Consejo para los Derechos Humanos de la ONU configure una comisión de investigación para examinar estas atrocidades", ha añadido Tasnim Motala, otro de los miembros del equipo.
El grupo dice haber encontrado pruebas de cuatro crímenes que cumplen los términos definitorios incluidos en la Declaración sobre el Genocidio de 1948: "El asesinato de un grupo concreto, sumado a la intención de dañar física o mentalmente a sus miembros, así como infligirles condiciones para destruirlos y para impedir su reproducción".
"Los Rohingya han muerto a manos de fuerzas de seguridad, han sido sometidos a violaciones, a abusos y asesinatos selectivos, confinados en campos e concentrción, privados de comida y sometidos a un genocidio biológico al restringir los nacimientos sobre ese grupo
El Gobierno birmano ha negado categórciamente estas acusaciones a través de su ministro de Información, Ye Htut, quien ha declarado que la situación de los Rohingya es una "cuestión interna".
"Es la clase de declaración", apunta en este sentido el grupo, "que dirían los líderes de estdos involucrados en graves derechos humanos".