BEIRUT, 12 Dic. (Thomson Reuters Foundation/EP) -
El Programa Mundial de Alimentos (PMA) de Naciones Unidas ha advertido de que el bloqueo impuesto en Yemen por la coalición que lidera Arabia Saudí amenaza con llevar al país a una "catástrofe humanitaria a gran escala de una magnitud aún mayor" a la que hay actualmente, con 8,4 millones de yemeníes a un paso de la hambruna.
El director del PMA para Yemen, Stephen Anderson, ha llamado a hacer todo lo posible para evitar que la hambruna termine de confirmarse en varias zonas que ya se encuentran en niveles críticos de inseguridad alimentaria. Anderson ha subrayado que, si la comida y el combustible no comienzan a entrar, habrá una "catástrofe" que estará "fuera del control de la comunidad humanitaria".
La coalición encabezada por Arabia Saudí impuso el bloqueo de puertos y aeropuertos para evitar que los rebeldes huthis recibiesen armas supuestamente suministradas desde Irán, pero lo cierto es que este cierre ha terminado de llevar al límite a una población que ya padecía graves necesidades como consecuencia de la guerra iniciada en marzo de 2015.
Aunque algunos buques comerciales han podido entrar, "no es suficiente", ha lamentado Anderson, que ha incluido los altos precios dentro de sus preocupaciones. "La población gasta el 70 por ciento de sus ingresos en comida", ha advertido, en declaraciones a la Thomson Reuters Foundation.
El jefe de la misión de Médicos Sin Fronteras, Djoen Besselink, ha asegurado por teléfono desde Saná que la situación ha pasado ya a la mera "supervivencia". Los problemas se han agravado especialmente en los hospitales, que dependen del combustible para mantener activos sus generadores.
Por su parte, un portavoz del Comité Internacional de la Cruz Roja, Adnan Hizam, ha coincidido en que hay una necesidad "masiva" de asistencia médica y humanitaria para la población yemení, mucha de la cual ni siquiera ha podido permanecer en sus hogares debido a la violencia. El conflicto, que se ha cobrado más de 10.000 vidas, ha convertido en desplazados a más de dos millones de personas.