MADRID, 22 Dic. (EUROPA PRESS) -
La Policía de Australia ha afirmado este viernes que por el momento no cuenta con pruebas que apunten a que el conductor que atropelló deliberadamente el jueves a 19 personas en la localidad de Melbourne tenga lazos con organizaciones extremistas.
El comisario de la Policía del estado de Victoria, Shane Patton, ha desvelado que "los investigadores han tenido acceso a él y, si bien no llevaron a cabo una entrevista formal, mantuvieron discusiones preliminares con él".
"Durante estas discusiones hizo algunas aseveraciones (...) sobre varios asuntos. Habló de sueños y voces, pero también atribuyó algunas de sus actividades al maltrato a los musulmanes", ha indicado.
"Obviamente, vamos a seguir explorando la totalidad del incidente e intentando descubrir cuáles son las motivaciones", ha dicho, recalcando que "no se ha descartado nada" y que "el comando antiterrorista sigue ayudando en la investigación".
Asimismo, ha apuntado que el hombre, de 32 años y de origen afgano, estaba recibiendo tratamiento psiquiátrico y no acudió a su cita durante la jornada del suceso, según ha informado la cadena de televisión local ABC. El detenido contaba además con un historial de uso de drogas.
Patton ha desvelado además que doce de los heridos continúan hospitalizados, entre ellos un hombre de cerca de 80 años que se encuentra en estado crítico. El estado de salud niño de cuatro años herido en estado crítico ha mejorado en las últimas horas.
La Policía de Victoria trabaja con la hipótesis de que el atropello ha sido "un acto intencionado" aunque no se ha pronunciado sobre las motivaciones que haya podido tener el autor de los hechos.
Además, ha señalado que ha sido detenida una segunda persona que los investigadores creen que no tendría relación con el atropello de Melbourne porque estaba grabando todo y tenía en su poder una mochila con cuchillos.
El primer ministro del estado de Victoria, Daniel Andrews, ha condenado lo sucedido y ha asegurado que se trata de "un acto malvado y de cobardía". Por su parte, el primer ministro australiano, Malcolm Turnbull, ha expresado sus condolencias a las víctimas.