MADRID 24 Ago. (EUROPA PRESS) -
La Policía australiana ha realizado este miércoles un registro en el Parlamento del país para intentar buscar pruebas relacionadas con la filtración de documentos sobre la National Broadband Network (NBN).
La orden de registro presentada por la Policía indica que los agentes quieren poder acceder a los correos electrónicos y grabaciones del personal laborista y varios medios de comunicación del país.
La Policía ya había realizado en mayo redadas en las oficinas del senador laborista Stephen Conroy, quien este mismo miércoles ha subrayado que los parlamentarios estaban siendo "intimidados".
"Esto es un abuso absoluto del proceso", ha argumentado, resaltando que la capacidad de los políticos para proteger a los informantes estaba en riesgo, según ha informado la cadena de televisión australiana ABC.
Tras las redadas de mayo, el líder opositor, Bill Shorten, acusó al Gobierno que encabeza el primer ministro, Malcolm Turnbull, de orquestar las operaciones policiales.
"Tengo claro que la investigación ha sido reclamado por la NBN, el buque insignia de Turnbull al frente del Gobierno", dijo, recalcando que "este Gobierno no puede distanciarse de las acciones de la NBN".
En respuesta, Turnbull aseguró que se enteró de la investigación tras ser informado por el ministro de Justicia, argumentando que la NBN denunció la filtración de documentación comercial y que "la Policía tomó de forma independiente la decisión de investigar".