MANILA, 10 Abr. (Reuters/EP) -
Arturo Lascañas, el policía que confesó haber dirigido uno de los "escuadrones de la muerte" creados por el presidente filipino, Rodrigo Duterte, cuando era alcalde de Davao, ha abandonado la nación asiática porque teme por su vida.
"Me han advertido de que mi vida está en peligro", ha dicho Lascañas en un vídeo publicado por el diario local 'Inquirer'. Por ello, hace dos días que partió de Filipinas rumbo a Singapur, donde tiene familia, de acuerdo con los medios de comunicación locales.
Durante una audiencia en el Senado, Lascañas confesó el pasado febrero que había matado a unas 300 personas, 200 como jefe de uno de los "escuadrones de la muerte" de Duterte, a quien organizaciones de defensa de los Derechos Humanos acusan de cometer ejecuciones extrajudiciales en el marco de su actual guerra contra las drogas.
A raíz de las declaraciones de Lascañas y otros dos testimonios que confirmaron el suyo, el Senado abrió una investigación que ha concluido que no existieron tales "escuadrones de la muerte" y la comisión parlamentaria encargada de las pesquisas ha recomendado acusar al policía de perjurio.