KINSHASA, 20 Dic. (Reuters/EP) -
La Policía congoleña ha empleado gases lacrimógenos este martes para dispersar a cientos de jóvenes concentrados en las calles de Kinshasa para reclamar al presidente del país, Joseph Kabila, que dimita después de que su mandato expirara la pasada medianoche.
En la capital han estallado algunas protestas limitadas después de que el líder opositor, Etienne Tshisekedi, haya llamado a los congoleños ha resistir pacíficamente a Kabila, que continúa en el poder en República Democrática del Congo pese a que su mandato ya ha expirado y para el que no hay sucesor puesto que las elecciones están convocadas para abril de 2018.
Varios distritos de la capital, de doce millones de habitantes, han registrado disparos esporádicos, mientras las medidas para evitar la disensión hacen temer que pueda haber más actos de violencia.
Las calles de Kinshasa, normalmente muy bulliciosas, han amanecido este martes prácticamente desiertas, dada la prohibición de manifestaciones y la fuerte presencia policial. Por ellas patrullan efectivos de la Misión de la ONU en RDC (MONUSCO).
"Creo que habrá disturbios. La gente está diciendo que Kabila tiene que marcharse", ha subrayado Joe Doublier, de 20 años, quien reside en el bastión opositor de Limite, donde jóvenes han quemado neumáticos y maderas en las calles. "Han pasado 16 años y nada ha cambiado", ha añadido, en referencia al tiempo que Kabila lleva en el poder desde que su padre fue asesinado en 2001.
"Hago un llamamiento solemne a los congoleños a que no reconozcan (...) la autoridad ilegal e ilegítima de Joseph Kabila y a que resistan pacíficamente su golpe de Estado", ha reclamado Tshisekedi en un mensaje colgado en YouTube.