MADRID, 31 May. (EUROPA PRESS) -
La Policía estadounidense ha disparado y matado a al menos 385 personas en lo que va de año, lo que supone la muerte de más de dos personas al día, según un análisis realizado por el diario 'The Washington Post'.
El diario ha resaltado que esta cifra supone el doble de muertes por disparos que las recogidas en las estadísticas oficiales del Gobierno durante la última década, un número que las propias autoridades reconocen que es incompleto.
"Nunca vamos a reducir el número de tiroteos policiales si no empezamos a seguir de forma adecuada esta información", ha afirmado Jim Bueerman, presidente de la ONG Fundación Policía, que tiene como objetivo mejorar la acción policial.
La publicación de este informe tiene lugar en un momento de debate nacional sobre el uso excesivo de la fuerza por parte de la Policía contra las minorías, tras la muerte de varios negros desarmados que han llevado a protestas multitudinarias.
'The Washington Post' ha explicado que desde principios de año ha realizado una base de datos que recoge todos los tiroteos policiales en los que ha habido muertos, además del fallecimiento de agentes tiroteados.
El diario solo ha incluido en su estadística las muertes durante 2015 por disparos, excluyendo otras causas como puñaladas o fallecimiento de detenidos bajo custodia policial.
MAYORÍA DE HOMBRES
La gran mayoría de los muertos --hasta 365-- eran hombres, mientras que 20 eran mujeres. 180 de los muertos eran de raza blanca, mientras que 105 eran negros y 57 de origen hispano. El rango de edad oscila entre los 16 y los 83 años.
Alrededor del 80 por ciento de los fallecidos estaban armados con objetos potencialmente letales, en su mayoría con pistolas, aunque también se han registrado cuchillos, machetes o con enfrentamientos en vehículos.
AYUDA EN PROBLEMAS DOMÉSTICOS
Otra de las cuestiones analizadas ha sido la causa del tiroteo que ha llevado a la muerte a alguno de los implicados. En la mayoría de ocasiones, la Policía estaba respondiendo a una petición de ayuda por problemas domésticos u otros problemas sociales.
La mayoría de los muertos eran de clase baja y tenían antecedentes policiales, principalmente por delitos menores. Además, 92 de los fallecidos, que suponen casi un cuarto del total registrado, han sido declarados por las autoridades o por sus familiares como trastornados mentales.
RESPONSABILIDAD POLICIAL
Según la ley estadounidense, la Policía tiene autorización para matar a un sospechoso cuando está en riesgo su vida o la de otras personas. Según los datos de este informe, en tres de los casos analizados un policía ha sido acusado de cometer un delito.
Varios policías, retirados y en activo, han afirmado al diario que las fuerzas de seguridad deberían rendir cuentas ante este tipo de muertes y han asegurado que muchas se podrían evitar con una mejor actuación policial.
"Tenemos que entender los fenómenos que hay detrás de estos sucesos fatales", ha afirmado Bueerman. "Hay una necesidad social imperiosa para ello pero existe una falta de voluntad política para hacer que suceda", ha lamentado.