PARIS, 28 Jul. (EUROPA PRESS) -
Agentes de la Brigada Financiera de la Policía han registrado la residencia de la hija de la multimillonaria Liliane Bettencourt, heredera de imperio L'Oréal, en el marco de la investigación sobre las escuchas telefónicas secretas que se realizaron en el domicilio de su madre y que destaparon un posible caso de evasión fiscal, según informa 'Le Figaro' en su edición electrónica.
Los agentes llegaron hacia las 6:30 horas a la casa de Françoise Bettencourt-Meyers y, según su abogado, Olivier Metzner, se llevaron agendas de su cliente y su marido, un ordenador, y "lo que ya se les había entregado, las transcripciones de las escuchas".
A petición de la Fiscalía de Nanterre, los investigadores tratan de determinar en qué circusntancias el mayordomo de la multimillonaria, Pascal Bonnefoy, tomó la decisión de grabar las conversaciones de Bettencourt entre mayo de 2009 y mayo de 2010. Asimismo, quieren determinar cómo se remitieron las grabaciones a la justicia y fueron difundidos por la prensa.
A mediados de julio, Bettencourt-Meyers ya había prestado declaración ante la Policía Judicial y había explicado que había sido contactada poco antes por Pascal Bonnefoy, quien le informó de su iniciativa y le entregó las grabaciones.
Entretanto, la Fiscalía de Nanterre anunció este miércoles que el interrogatorio del ministro de Trabajo, Eric Woerth, por agentes de la Brigada Financiera en relación con este caso no se celebraría durante esta jornada, pero sí antes de que termine la semana. Inicialmente se había indicado que Woerth sería interrogado el martes, después de que el lunes prestara declaración la propia Bettencourt.