MADRID, 22 (EUROPA PRESS)
Al menos nueve personas han sido detenidas y dos han resultado heridas cuando cientos de soldados de las fuerzas de seguridad de Sri Lanka han desmantelado este viernes el principal campamento de protesta antigubernamental en la capital, Colombo, y han comenzado a desmontar las tiendas de campaña.
Las tensiones han aumentado cuando las tropas han desalojado a los manifestantes del recinto y la Policía ha detenido a nueve personas y dos más han resultado heridas, tal y como ha informado el portal Adaderana.
En una operación conjunta del Ejército, la Policía y la Fuerza Especial de Sri Lanka, se han desmantelado las tiendas de campaña levantadas frente a la Secretaría Presidencial.
Las fuerzas de seguridad habían advertido que detendrían a los manifestantes en virtud de las leyes de emergencia si se enfrentaban a los agentes.
Por otro lado, la cadena británica BBC ha denunciado que uno de sus periodistas ha sido golpeado por el Ejército ceilandés y un soldado le ha arrebatado el teléfono y ha borrado los vídeos que había realizado.
El desmantelamiento del campamento de protesta se ha producido menos de 24 horas después de que el nuevo presidente de Sri Lanka, Ranil Wickremesinghe, haya tomado posesión del cargo, en una ceremonia celebrada un día después de su elección por parte del Parlamento.
Las autoridades de Sri Lanka anunciaron el 14 de julio la imposición de un toque de queda a partir de las 12.00 horas (hora local) en el distrito de Colombo, la ciudad más poblada y antigua capital del país, en medio de la oleada de manifestaciones de los últimos días y tras la huida del país del presidente, Gotabaya Rajapaksa.
RECRIMINACIONES INTERNACIONALES
Estados Unidos y Naciones Unidas han expresado su preocupación por el violento desalojo y avisado de que cualquier represión de este tipo podría acabar reventando el proceso de transición.
"Profundamente preocupada por las acciones tomadas contra los manifestantes en Galle Face en mitad de la noche. Instamos a las autoridades a la moderación y al acceso inmediato a atención médica para los heridos", ha declarado la embajadora de EEUU en Sri Lanka, Julie Chung.
También la coordinadora de Naciones Unidas en el país, Hanaa Singer-Hamdy, se ha declarado "gravemente preocupada por el uso de la fuerza para dispersar a los manifestantes", antes de recordar que "los periodistas y los defensores de los Derechos Humanos tienen derecho a supervisar manifestaciones y sus funciones no deben ser obstaculizadas".