La Policía de Sudáfrica dice que la huelga del lunes es un intento de derrocar al Gobierno

MADRID, 17 Mar. (EUROPA PRESS) -

La Policía de Sudáfrica ha asegurado este viernes que las protestas convocadas por la oposición para el próximo lunes, con motivo de la crisis energética, van más allá de un mero paro y son un intento por derrocar al Gobierno del Cyril Ramaphosa.

"Esto es un intento de derrocar al Gobierno. Esto no es un paro, es anarquía", ha enfatizado el jefe de la Policía de KwaZulu-Natal, el teniente general Nhlanhla Mkhwanazi, mientras informaba de los planes de seguridad para los siguientes días.

"La magnitud de las amenazas difiere de otros cierres planificados y es por eso que tenemos que estar más atentos", ha dicho Mkhwanazi, quien ha advertido al partido opositor Luchadores por la Libertad Económica (EFF) de que será imputado si se hay muertes y daños a la propiedad, informa el diario sudafricano 'The Witness'.

En ese sentido, el jefe de Policía ha asegurado que EFF no ha dado aviso a las autoridades de la convocatoria de estas protestas y que si son conscientes de ellas es gracias a los medios de comunicación.

"Todos tienen derecho a manifestarse, la ley permite que las personas se reúnan. Ni siquiera necesitan pedir permiso, tan solo necesitan avisar. Pueden reunirse, no importa de qué partido sea, pero deben avisar", ha insistido Mkhwanazi, recoge el canal de televisión eNCA News.

Por su parte, el ministro de Policía, Bheki Cele, ha advertido a los manifestantes que todos aquellos que sean sorprendidos violando la ley, o bien impidiendo que otras personas acudan a sus puestos de trabajo serán arrestados.

"Los que van a protestar tienen derecho a marchar, pero hay restricciones y formas y medidas a seguir. No tienen permiso ni derecho a dañar a nadie, o impedir a cualquier sudafricano que quiera ir a trabajar", ha dicho Cele, quien ha prometido que protegerán a todos aquellos que quieran acudir a su puesto laboral.

"Nadie debe saquear ni obligar a nadie a cerrar sus negocios. Estaremos allí para detener a cualquiera que intente obligar a alguien a hacer algo en contra de su voluntad", ha subrayado.