MADRID, 23 Ene. (EUROPA PRESS) -
El Frente Polisario ha criticado duramente este jueves la aprobación por parte del Parlamento de Marruecos de dos proyectos de ley que delimitan sus fronteras marítimas con España y Mauritania y ha recalcado que esta situación es "una consecuencia directa del fracaso de España".
El responsable del Comité de Relaciones Exteriores del Frente Polisario, Mohammad Jadad, ha resaltado en un comunicado que dichos proyectos de ley "no son más que otro episodio del expansionismo marroquí" y ha denunciado que con ellos "pretende anexionarse las aguas adyacentes al Sáhara Occidental".
Así, ha manifestado que estos proyectos "igualmente pretenden anexionarse las aguas territoriales adyacentes a las islas Canarias y otros territorios españoles" y se enmarcan en una "campaña desesperada" de Rabat "para legitimar su ocupación ilegal de partes del Sáhara Occidental".
Asimismo, ha reiterado que la legislación marroquí para la delimitación de las fronteras marítimas "no tiene ningún fundamento jurídico y es simplemente un acto de propaganda", antes de agregar que la comunidad internacional "lo considerará sólo como otro intento marroquí desesperado para desviar la atención de la aguda crisis estructural que padece el régimen marroquí".
Jadad ha adelantado además que el Frente Polisario "examinará las medidas que se adoptan en los procedimientos judiciales que ha presentado ante el Tribunal General de la Unión Europea, y seguirá con interés las medidas que tomará España en este aspecto".
"De ser necesario, no dudará en someter el asunto ante el Tribunal Internacional del Derecho del Mar para que se establezca que estas leyes son nulas y sin valor", ha zanjado Jadad.
Jadad ha cargado contra "el fracaso de España, siendo la potencia administradora del Sáhara Occidental, para cumplir con su responsabilidad jurídica e histórica de descolonizar el territorio saharaui conforme a las resoluciones pertinentes de la Asamblea General de la ONU, por un lado, y la sumisión injustificada de España a la política de chantaje marroquí, por otro lado".
En este sentido, ha puntualizado que el Ejecutivo español "debe ser consciente de que las llamadas 'fronteras auténticas' de Marruecos, que representan el epítome del expansionismo marroquí, no tienen límites", según ha recogido la agencia de noticias saharaui SPS.
Por ello, ha hablado de "una oportunidad" para que "la España democrática y su Gobierno progresista rectifiquen este gran error histórico y asuman sus responsabilidades históricas, jurídicas y morales hacia el pueblo saharaui y sus derechos inalienables a la autodeterminación, la independencia y la soberanía permanente sobre sus recursos naturales".
"El Gobierno español también debe reconocer que hacer más concesiones a la política de chantaje a la que Marruecos viene sometiendo a España solo alentará a Marruecos a persistir en su expansionismo del que el pueblo saharaui sigue sufriendo desde que Marruecos ocupó al Sáhara Occidental por la fuerza en octubre de 1975, con la complicidad de las autoridades españolas de entonces", ha argüido.
LOS PROYECTOS APROBADOS
Los dos proyectos de ley fueron aprobados por unanimidad el miércoles por parte de la Cámara de Representantes de Marruecos, la cámara baja del Parlamento del país.
Estas leyes, una vez aprobadas, establecerán el límite de las aguas territoriales, fijado en doce millas, y crean una Zona Económica Exclusiva, de 200 millas. Asimismo, la plataforma continental queda delimitada en las 200 millas.
El ministro de Exteriores marroquí, Naser Burita, destacó el miércoles que "la delimitación de los espacios marítimos nacionales es un asunto interno y un acto de soberanía que tiene su fundamento en el Derecho Internacional", según informó la agencia de noticias marroquí MAP.
Asimismo, destacó que "podría estar sujeto a negociaciones entre el Reino y los estados con costas limítrofes, particularmente España", país al que describió como "un socio estratégico vinculado a Marruecos por fuertes relaciones políticas, económicas e históricas".
Burita explicó que Rabat "no busca imponer unilateralmente una política de hechos consumados" y agregó que "velará por sus derechos, respetará los compromisos, seguirá abierto a las posiciones nacionales de los países vecinos amigos y sus derechos legítimos".
De esta forma, apostó por un "diálogo constructivo" que permita "lograr los compromisos globales y de igualdad", si bien destacó que los proyectos de ley van en línea con lo contemplado por el Derecho Internacional.