MADRID, 22 Mar. (EUROPA PRESS) -
Los hombres tienen tres veces más presencia que las mujeres en las comisiones oficiales que combaten la pandemia de COVID-19 y sus efectos en todo el mundo, según un estudio que quiere poner de relieve la infrarrepresentación femenina en la toma de decisiones en un momento clave, no solo en el terreno sanitario.
El estudio, en el que colaboran el Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), ONU Mujeres y la Universidad de Pittsburgh, concluye que solo el 24 por ciento de los miembros de las 225 comisiones examinadas en 137 países son mujeres. En 26 de estos grupos ni siquiera hay representación femenina, ya que todos sus integrantes son hombres, y solo en ocho hay paridad.
El dato contrasta con la mayoritaria presencia de mujeres en la primera línea frente a la pandemia --en el sector sanitario representan hasta el 70 por ciento del colectivo-- y también por los efectos específicos que sufren en materia social económica, ya que son mayoría en el trabajo informal. Unos 47 millones de mujeres corren el riesgo de caer en la extrema pobreza por la pandemia.
El administrador del PNUD, Achim Steiner, ha lamentado que las mujeres "han sido sistemáticamente excluidas de los procesos de toma de decisiones sobre cómo atajar el impacto de la pandemia", a pesar de que su plena inclusión se considera "clave" para "garantizar que sus necesidades quedan cubiertas de forma adecuada" y sentar buenas bases para las generaciones venideras.
"Es inconcebible que podamos hacer frente a la crisis más discriminatoria que hemos sufrido nunca sin la plena implicación de las mujeres", ha señalado por su parte la directora ejecutiva de ONU Mujeres, Phumzile Mlambo-Ngcuka, que ve en la plena inclusión un garantía para lograr un futuro "equitativo, que atiende a las necesidades de género y más verde".
ENFOQUES ESPECÍFICOS
El estudio concluye que 32 países no han adoptado ninguna medida concreta por razones de género y, en términos generales, solo el 13 por ciento de las medidas fiscales, de protección social o laborales analizadas hasta este mismo mes atendían de forma específica a las mujeres.
Apenas el 11 por ciento de las iniciativas en materia de protección social o laboral se han centrado en el trabajo doméstico o no remunerado, un ámbito en el que las mujeres triplican a los hombres.
En general, la mayoría de las medidas han tenido poca relevancia o han sido temporales. En este sentido, los investigadores han apuntado que las ayudas económicas han durado 3,3 meses de media y han reclamado programas más a largo plazo para potenciar la recuperación de toda la sociedad.
El informe incluye también un apartado de buenas prácticas --reducido básicamente a las regiones de Europa y las Américas-- que alude a los 34 países donde se ha tenido en cuenta el servicio de cuidado de hijos, los 44 por ciento en los que se han aprobado bajas familiares o por enfermedad o los 11 en los que se ha ampliado la flexibilidad laboral.