ESTAMBUL/BERLÍN, 1 Jun. (Reuters/EP) -
El presidente armenio, Serzh Sargisián, ha instado este miércoles a los parlamentarios alemanes a que no se sientan amedrentados por las advertencias del presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, en las que amenazaba con un deterioro de las relaciones entre Berlín y Ankara, y a que sigan adelante con el proyecto de ley que calificará como genocidio el asesinato en masa de ciudadanos armenios que tuvo lugar en 1915 por parte del Imperio Otomano.
Los diputados alemanes votarán este jueves si deciden apoyar o no una resolución que pasaría a calificar de genocidio la matanza de miles de armenios a principios del siglo pasado, siguiendo los pasos de otros parlamentos occidentales, como los de Canadá o Francia. Por su parte, Turquía ha negado rotundamente que se tratase de un genocidio.
"Estoy totalmente seguro de que los políticos alemanes en el Bundestag no se sentirán amenazados", ha declarado el presidente armenio en una entrevista publicada este miércoles por el diario alemán 'Bild'. "Si uno se compromete por intereses políticos a corto plazo, lo acaba haciendo una y otra vez. Eso es malo para Alemania, es malo para Europa y es malo para el mundo", ha añadido Sargsyan.
Turquía ha reconocido que muchos cristianos armenios fueron masacrados durante las batallas contra el Imperio Otomano en la Primera Guerra Mundial, pero niega que miles de ellos fueran asesinados por orden de las autoridades otomanas o que existiese una campaña para exterminar al pueblo armenio, por lo que rechaza el término genocidio.
Erdogan declaró durante una comparecencia en la televisión turca el martes que si el proyecto de ley es aprobado, dañaría de forma sustancial las relaciones entre Alemania y Turquía. El primer ministro de Turquía, Binali Yildrim, ha calificado también este miércoles la propuesta del Bundestag como algo "rídiculo" y perjudicial para las relaciones entre ambos países.
La portavoz del Gobierno, Christiane Wirtz, ha anunciado este miércoles que la canciller alemana, Angela Merkel, no podrá estar presente a la hora de la votación, debido a que se celebrará a la hora del almuerzo y a esa hora Merkel tiene varios actos públicos programados que no puede eludir.
Ha sido el partido de Los Verdes, en la oposición, los que han presionado para que dicha resolución se incluyera en el orden del día del Parlamento. El momento, sin embargo, no podría ser peor para Merkel, principal responsable del acuerdo entre la Unión Europa y Turquía que ha restringido la cantidad de refugiados que pueden entrar en Europa, que no puede permitirse ningún tipo de tensiones con Ankara.
Al no presentarse a la votación, Merkel se arriesga a recibir numerosas críticas por su postura con Turquía. Sus críticos alemanes la acusan de ser demasiado blanda con Ankara en materia de Derechos Humanos debido a su determinación de mantener bajo el flujo de refugiados desde la frontera turca.
El acuerdo de inmigración de la Unión Europea con el Gobierno turco ha acabado con parte de las presiones políticas a Merkel en Alemania. Sin embargo, el acuerdo se encuentra en la cuerda floja tras la retirada del principal defensor del acuerdo en el Gobierno turco, Ahmet Davutoglu. Desde la renuncia del ex primer ministro, Erdogan ha comenzado a cuestionar diversos puntos del acuerdo y algunos de sus aliados han amenazado con permitir el paso a una nueva oleada de refugiados en Europa.