MADRID, 27 Jun. (EUROPA PRESS) -
El presidente de Estonia, Alar Karis, ha ratificado este martes la legislación sobre el matrimonio homosexual, que convierte al país en el primero de los bálticos en legalizar este tipo de uniones.
El jefe de Estado ha confirmado así que ha firmado una serie de normativas adoptadas hace una semana por el Parlamento tras una cuestión de confianza presentada por el Gobierno de la primera ministra, Kaja Kallas.
"Se trata de reformas clave que han provocado numerosas disputas en el seno de la sociedad. Estas cuestiones incluyen la definición del matrimonio, la defensa nacional y los impuestos", ha aclarado antes de manifestar que "son decisiones complejas que deben ser tomadas".
Karis ha destacado que su deber es "proteger la Constitución", la cual ha calificado de "central para la democracia". "Esto implica que el Parlamento debe ser un espacio para la toma de decisiones. Admito que me he mostrado dubitativo ante la idea de vincular la aprobación de estas leyes a una serie de cuestiones de confianza, pero la Constitución da esta oportunidad", ha matizado, según ha recogido el diario 'Postimees'.
"Ahora imaginemos la situación extrema en la que el Gobierno presenta todas las reformas legislativas mediante cuestiones de confianza. Esto iría en contra de la Constitución porque neutralizaría la actividad parlamentaria", ha puntualizado en un intento de recalcar que este tipo de medidas deben ser puntuales.
La semana pasada, el Parlamento dio por fin el 'sí' a las medidas, entre ellas a la legislación del matrimonio entre personas del mismo sexo. Kallas dijo sentirse "orgullosa" de su país tras la aprobación de la medida. "Estamos construyendo una sociedad en la que los derechos de todos son respetados y la gente puede amar libremente", afirmó.
La legislación en cuestión, que prevé una reforma de la Ley de Familia, entrará en vigor en 2024. "Todo el mundo debe tener la oportunidad de casarse con aquella persona a la que ame y con la que quiera pasar el resto de su vida. Con esta decisión, finalmente nos sumaremos a otros países nórdicos y otras democracias del mundo que tienen este derecho garantizado", puntualizó.
A pesar de la reticencia de la extrema derecha, Estonia se ha convertido también en el primer país de la antigua Unión Soviética en legalizar el matrimonio homosexual.