El presidente filipino niega que los rebeldes locales tengan relación con Estado Islámico

MANILA, 9 Mar. (Reuters/EP) -

El presidente filipino, Benigno Aquino, ha negado este miércoles que haya milicianos relacionados con el grupo terrorista Estado Islámico operando en el sur del país y ha descrito a los grupos armados de la zona como mercenarios que buscan recaudar fondos en el extranjero.

Algunos grupos islamistas, pequeños pero violentos, han publicado vídeos en redes sociales en los que se han comprometido a unirse al Estado Islámico y han mostrado la bandera negra del grupo.

"Es difícil considerarles grupos del Estado Islámico", ha asegurado Aquino. Los grupos no están dirigidos por una ideología o religión, "son las razones mercenarias las que les han impulsado a hacer esto", ha explicado.

Los grupos locales han estado llevando a cabo ataques en el sur para llamar la atención y conseguir financiación de Oriente Próximo, especialmente de Estado Islámico, ha añadido el presidente.

El lunes, el líder del grupo armado del Frente Moro de Liberación Islámica (MILF), Murad Ebrahim, advirtió de que Estado Islámico podría lograr avances en el país debido a los retrasos en la ratificación del acuerdo de paz alcanzado en 2014.

Ebrahim indicó durante una rueda de prensa en Kuala Lumpur que el grupo yihadista extremista podría sacar ventaja de la frustración de la población musulmana de la región de Mindanao (sur).

Por su parte, la principal asesora de paz del Gobierno, Teresita Deles, comparte la opinión del líder rebelde sobre una posible penetración del grupo en el sur del país.

"Estamos de acuerdo en que las frustraciones de la gente pueden llevar a un recrudecimiento del extremismo radical", ha señalado y ha añadido que el Gobierno y el MILF están trabajando juntos para frenar la difusión del extremismo.

Las fuerzas de seguridad han asegurado que no existe ninguna prueba que demuestre que los grupos rebeldes locales tengan relación con los extremistas establecidos en Oriente Próximo.

"No hay una presencia directa, verificable y creíble de ningún grupo internacional en el país", ha garantizado el portavoz del Ejército, el general de brigada Restituto Padilla.

En febrero, el Ejército y las Fuerzas Aéreas se enfrentaron con un pequeño grupo musulmán rebelde, que aseguraba estar relacionado con los milicianos del Estado Islámico, en la provincia de Lanao del Sur. El enfrentamiento, que duró nueve días, se saldó con la muerte de 40 rebeldes y cinco soldados.