MADRID, 22 Jun. (EUROPA PRESS) -
El presidente de Gambia, Adama Barrow, realizará este viernes una visita a la localidad de Faraba, en la que el lunes murieron tres personas por disparos de la Policía contra una manifestación, en lo que el propio mandatario ha descrito como "su día más triste".
"No podemos permitirnos repetir lo que solía pasar en la nueva Gambia. Ayer fue el día más triste de mi vida desde que me convertí en presidente de este país porque (el incidente) me hizo reflexionar mucho acerca de lo que tuvimos que pasar para lograr la libertad que disfrutamos hoy", dijo el presidente el martes.
La Presidencia ha subrayado en un comunicado que Barrow se reunirá con residentes para expresar sus condolencias y respetos a los familiares de las víctimas.
Barrow aceptó el jueves la dimisión del inspector general de la Policía de Gambia, Landing Kinteh, días después de distanciarse de las responsabilidades en un comunicado en el que recalcó que las fuerzas del orden desplegadas en la ciudad no tenían autorización para abrir fuego.
Kinteh fue nombrado en el cargo en junio de 2017 y se convirtió en el primer jefe de la Policía bajo mandato de Barrow, sustituyendo así a Yankuba Sonko, nombrado por Yahya Jamé.
La manifestación fue convocada para protestar contra un proyecto de minería en la localidad y derivó en enfrentamientos con la Policía.
En este sentido, el presidente del Comité de Desarrollo Local de Faraba ha resaltado que la ciudad "es una comunidad pacífica" y que "el incidente no fue político, sino consecuencia de la necesidad de proteger los intereses vitales de la comunidad".
Asimismo, ha dicho que "la comunidad no es parte ni está vinculada con ninguna manifestación relacionada con el incidente en ninguna parte del país", por lo que ha pedido a aquellos que quieran expresar su solidaridad que acudan a Faraba.
Los incidentes tuvieron lugar tras varias semanas de malestar en la localidad de Faraba por esta explotación minera debido a las denuncias sobre el impacto ambiental de la misma.
Las ONG Human Rights Watch (HRW) y Amnistía Internacional (AI) instaron el miércoles a las autoridades de Gambia a abrir una investigación exhaustiva sobre los incidentes.