MADRID 5 Mar. (EUROPA PRESS) -
El presidente de Ghana, Nana Akufo-Addo, ha afirmado este martes que no promulgará la controvertida ley endureciendo las condenas contra personas LGBTQ hasta que el Tribunal Supremo no se haya pronunciado sobre las apelaciones presentadas contra la misma, en medio de la polémica tras su aprobación la semana pasada por parte del Parlamento.
El mandatario ha dicho ser consciente de la "considerable ansiedad generada en algunas sedes de la comunidad diplomática y entre algunos amigos de Ghana" tras la aprobación del proyecto de ley, antes de recalcar que no habrá un retroceso en el respeto de los Derechos Humanos en el país africano.
"Creo que, en estos momentos, sirve de poco entrar en los detalles del origen de esta propuesta de ley, que aún no ha llegado a mi despacho", ha señalado, antes de recalcar que tiene constancia de que se ha presentado una apelación ante el Supremo por parte de "un ciudadano preocupado por la constitucionalidad de la legislación propuesta".
"En esta circunstancia, debemos unir nuestras manos y esperar la decisión del tribunal antes de adoptar cualquier acción. La operación de las instituciones del Estado ghanés determinará la futura trayectoria del Estado de Derecho y el cumplimiento de los Derechos Humanos en nuestro país", ha zanjado, según ha recogido la cadena de televisión UTV.
Las palabras de Akufo-Addo han llegado un día después de que el Ministerio de Finanzas le pidiera no ratificar la polémica ley afirmando que el país podría perder cerca de 3.800 millones de dólares (unos 3.500 millones de euros) en financiación del Banco Mundial durante los próximos cinco años.
El Parlamento ghanés aprobó la semana pasada una nueva legislación que prohíbe la promoción, defensa y financiación de las actividades del colectivo LGTBQ, incluidas condenas que van desde los seis meses hasta los tres años de prisión para aquellos que se identifiquen como miembros del colectivo; y penas desde los tres a los cinco años de cárcel para los promotores o patrocinadores de actividades del mismo.
Este proyecto de ley es, a pesar de todo, una versión suavizada del último borrador presentado en el Parlamento, que contemplaba penas de prisión más extensas e incluso una controvertida cláusula sobre terapias de reconversión. Ghana ya ilegalizó en el pasado las relaciones sexuales entre personas del mismo sexo, penadas con una condena de hasta tres años de cárcel.