MADRID, 29 Dic. (EUROPA PRESS) -
El presidente de Paraguay, Santiago Peña, ha hecho balance este viernes de la lucha contra el crimen organizado llevada a cabo por su Gobierno, especialmente tras la macrooperación 'Veneratio' que permitió a las fuerzas de seguridad retomar el control de la cárcel de Tacumbú.
"Nuestra lucha está compuesta de grandes y pequeñas batallas de actos de coraje. Hace meses tomamos la decisión en la que dijimos que el Estado no puede estar sometido por aquellos que decidieron caminar por fuera de la ley", ha manifestado el mandatario paraguayo, según recoge el diario local 'ABC Color'.
En un acto celebrado en la sede de la Policía Nacional y acompañado del ministro del Interior, Enrique Riera, el presidente Peña ha participado en un acto de condecoración a agentes de seguridad por su desempeño en la citada operación 'Veneratio' y en otros dispositivos policiales contra el crímen.
En este sentido, Peña ha asegurado estar "orgulloso" de los resultados obtenidos porque generan un "efecto contagio" en los funcionarios y agentes de seguridad para ejercer un control más estricto ante casos de crimen organizado, por lo que considera que su esfuerzo por combatir la criminalidad "vale la pena".
"Me siento orgulloso de las luchas que hemos enfrentado, pero todavía más orgulloso del impacto que esto está teniendo porque el éxito de una sociedad ciertamente es una conducta de una sociedad en su conjunto", ha recalcado Peña, que asegura "rehusar de tener miedo de una persona que está privada de su libertad".
La macrooperación 'Veneratio', desarrollada a mediados de diciembre, se nutrió de más de 2.300 militares y policías para retomar el control de la Penitenciaría Nacional de Tacumbú, tomada por el destacado clan Rotela, liderado por Armando Javier Rotela. Las autoridades arrestaron a casi 700 presos para trasladarlos a otras cárceles del país.