VARSOVIA, 25 May. (DPA/EP) -
El presidente de Polonia, Andrzej Duda, ha designado a una antigua funcionaria del Ministerio de Justicia como nueva presidenta del Tribunal Supremo, en plena polémica por la reforma promovida desde el Gobierno y que, según quienes la critican, pone en tela de juicio la separación de poderes.
La nueva jefa del Supremo, Malgorzata Manowska, está considerada una estrecha aliada del actual responsable del Ministerio de Justicia, Zbigniew Ziobro, y formaba parte de la lista corte de cinco nombres que se había anunciado el sábado, después de varios días de deliberaciones.
El proceso ha agudizado la división entre los magistrados veteranos del tribunal y aquellos designados tras las últimas reformas judiciales impulsadas por el partido gobernante, Ley y Justicia (PiS). Según los más antiguos, no se han cumplido los procedimientos.
El expresidente del Tribunal Constitucional Andrzej Zoll ha criticado el nombramiento, acusando a Duda de "no tener en cuenta el bien del Estado", sino únicamente los intereses del PiS. En este sentido, ha considerado en declaraciones a TVN24 que, a excepción del Comisionado para los Derechos Humanos, "no hay ni un solo cargo independiente del partido gobernante" a día de hoy.
También se ha sumado a las críticas la asociación judicial Iustitia, la mayor del país, al señalar que Manowska tiene "estrechos lazos con la clase política" y cuestionar los procedimientos seguidos durante todo el proceso de renovación en el Tribunal Supremo.