Archivo - El presidente de República Checa, Petr Pavel. - Europa Press/Contacto/President Of Ukraine
Pide vigilar a los ciudadanos rusos que hayan salido del país
MADRID, 15 (EUROPA PRESS)
El presidente checo, Petr Pavel, ha descartado este jueves que exista al menos de momento posibilidad de negociar con el presidente ruso, Vladimir Putin, para lograr la paz en Ucrania y ha acusado al mandatario de "mentir casi a diario" en relación con el desarrollo de la guerra.
En este sentido, ha arremetido contra "aquellos líderes que se han reunido con Putin" y ha matizado que esta situación "no le hace feliz". "Para ser honesto, no puedo imaginar hablar con estos líderes que mienten cínicamente todos los días, distorsionan la información y son capaces de culpar a otros de un ataque y unos crímenes que ellos mismos han cometido", ha dicho en una entrevista con la emisora Radio Liberty.
"Es muy difícil creer que nadie podrá sentarse a la mesa de negociaciones con gente como esta", ha puntualizado antes de matizar que "si no puedes confiar en los argumentos de la otra parte en una mesa de negociaciones no habrá posibilidades de alcanzar una postura razonable al respecto".
Es por ello que ha afirmado que "Ucrania tendrá éxito en su contraofensiva" y ha aventurado que podría "lograr un cambio de postura en el liderazgo ruso para hallar soluciones pragmáticas", aunque ha destacado que "en este momento no lo ve posible".
Sin embargo, ha expresado que el argumento de que se trata simplemente de la guerra de Putin "y no la de Rusia" no es válido dado que "muchos rusos apoyan la guerra" y ha abogado por hacer uso de "cualquier oportunidad para hablar del futuro de Rusia bajo diferentes condiciones".
Por otra parte, ha propuesto que los ciudadanos rusos que vivan en países europeos "sean vigilados precavidamente" dado que "son capaces de provocar daños" y ha pedido que Ucrania sea "aceptada rápidamente como miembro de la Unión europea y la OTAN una vez finalice la guerra".
Así, ha matizado que "todos los rusos deben pagar el precio" de la guerra y ha trazado un paralelismo con los "ciudadanos japoneses en Estados Unidos durante la Segunda Guerra Mundial". "Deben ser supervisados atentamente por los servicios secretos y pagar un precio", ha dicho.