MADRID 6 Oct. (EUROPA PRESS) -
El presidente de Túnez, Kais Saied, ha depositado ya su voto en las elecciones que se están celebrando este domingo en el país y en las que parte como destacado favorito para revalidar el cargo a pesar de las críticas contra su deriva autoritaria.
Saied ha depositado su papeleta en torno a las 11.00 (hora de la España peninsular y Baleares) en un colegio del barrio de Nasr, en la capital del país.
Mientras tanto, el máximo responsable electoral del país, el presidente de la Alta Autoridad Electoral Independiente, Farouk Bouasker, ha asegurado que las elecciones transcurren con normalidad y desmintió informaciones aparecidas en las últimas horas sobre una baja participación.
"Los votantes están acudiendo a las urnas en número destacable", ha manifestado en declaraciones recogidas por la emisora MosaiqueFM.
Saied, quien en los comicios de 2019 se impuso en la segunda vuelta con el 72,7 por ciento de los votos --frente al 27,3 recabado por el magnate Nabil Karui, quien permaneció encarcelado la mayor parte de la campaña electoral--, ha encabezado desde 2021 una campaña de creciente represión que ha limitado el espacio cívico, lo que pone en duda la representatividad de los comicios.
El presidente se enfrenta a dos candidatos de poco peso: Zuhair Magzhaui, líder del Movimiento del Pueblo (Echaab) --que encabeza desde 2013 a raíz del asesinato del entonces jefe del partido, Mohamed Brahmi, uno de los principales referentes de la izquierda tunecina--, y Ayachi Zamel, líder del partido liberal Azimun, encarcelado durante la campaña electoral.
El país, considerado como uno de los pocos ejemplos de éxito democrático tras el estallido de la 'Primavera Árabe', ha sufrido durante el último lustro un retroceso en derechos y libertades que ha sido achacado al presidente, lo que ha llevado a sus críticos a trazar paralelismos entre él y Zine el Abidine ben Alí, quien gobernó el país de 1987 a 2011, y cuyo largo mandato acabó precisamente con esta revolución.