MADRID, 13 May. (EUROPA PRESS) -
Diplomáticos de Estados Unidos, la Unión Europea (UE) y Canadá se han retirado este jueves de la sesión de investidura del presidente de Uganda, Yoweri Museveni, después de que éste tildara al Tribunal Penal Internacional (TPI) de "banda de inútiles".
Durante la ceremonia, en la que ha estado presente el presidente de Sudán, Omar Hasán al Bashir, reclamado por el TPI, Museveni ha recalcado que Uganda "ha perdido todo el interés por el tribunal".
Uganda es miembro del TPI, lo que significa que debería actuar para ejecutar la orden de arresto contra Al Bashir. El viaje de Al Bashir es el primero a Uganda desde que el TPI emitió sus órdenes de arresto y se produce después de la visita de Museveni a Jartum el año pasado.
Al Bashir, que gobierna Sudán desde el golpe de Estado de 1989, rechaza la autoridad del TPI y ha ignorado previamente la orden de arresto, viajando a países de Oriente Próximo y África. También ha visitado China e Indonesia, países que no son miembros del TPI, durante el último año.
"El TPI no es más un asunto nuestro. Es un organismo inútil. Inicialmente lo apoyamos pensando que sería serio, pero no es más que un grupo de personas inútiles", ha subrayado Museveni, según ha informado la emisora Radio France Internationale.
En este sentido, el portavoz del Gobierno ugandés, Owfono Opondo, ha defendido la decisión de invitar a Al Bashir, argumentando que "es el presidente legítimo de Sudán". "No vemos ninguna razón para que no sea invitado", ha agregado.
Por su parte, la directora de la oficina de prensa del Departamento de Estado, Elizabeth Trudeau, ha confirmado la retirada de los diplomáticos de la ceremonia, tildando las palabras de Museveni de "desdeñosas".
"Creemos que abandonar la ceremonia en protesta es una reacción apropiada ante un jefe de Estado que se burla de los esfuerzos para garantizar una rendición de cuentas a las víctimas de genocidio, crímenes de guerra y crimenes contra la Humanidad", ha dicho.
Trudeau ha explicado que, si bien Estados Unidos no es parte del Estatuto de Roma, "apoya firmemente los esfuerzos del TPI para que los responsables de genocidio, crímenes contra la Humanidad y crímenes de guerra en Darfur rindan cuentas".