MADRID, 3 Oct. (EUROPA PRESS) -
El presidente de Zimbabue, Emmerson Mnangagwa, ha anunciado la creación de una comisión especial para investigar los episodios de violencia durante las manifestaciones contra su Gobierno desde que fuera elegido en las elecciones celebradas en 2018.
"Las reformas democráticas en marcha deben fortalecer los derechos y libertades constitucionales de todos los zimbabuenses, para lo que la cultura del miedo y la violencia debe ser erradicada de nuestras sociedades", ha dicho, según el diario 'New Zimbabwe'.
"En línea con este compromiso de defender nuestra democracia, he creado un cuerpo especial interministerial para investigar los asuntos políticos, electorales, legislativos y administrativos", ha agregado, en referencia a la violencia política.
Al menos seis civiles murieron tiroteados por las fuerzas de seguridad el 1 de agosto de 2018 en el marco de las protestas contra la comisión electoral y en rechazo del anuncio de la victoria de Mnangagwa en los comicios.
Posteriormente, otros 17 civiles murieron a manos del Ejército durante una oleada de manifestaciones contra la decisión del Gobierno de incrementar drásticamente los precios del combustible.
Tras dichos incidentes, el propio presidente prometió "rodarán cabezas" que si se confirma que las fuerzas de seguridad cometieron excesos violentos con los manifestantes en las protestas contra el Gobierno.
Mnangagwa, que llegó al poder con el apoyo de un golpe de Estado militar que llevó a la renuncia del anterior mandatario, Robert Mugabe, en 2017, ganó las últimas elecciones con la promesa de reactivar la economía, devastada por el anterior régimen.
El mandatario ha estado alentando las inversiones en el país africano con el lema de que "Zimbabue está abierto a los negocios" y se ha presentado como un dirigente más democrático y respetuoso con los Derechos Humanos que su antecesor en el cargo.
Sin embargo, algunos zimbabuenses creen que las cosas van aún peor con Mnangagwa de presidente, especialmente en el plano económico. Tras el inicio de las protestas, el Gobierno de Zimbabue ordenó el corte de Internet, una medida declarada ilegal el lunes por un tribunal.