MADRID, 6 Mar. (EUROPA PRESS) -
Presos de las organizaciones armadas kurdas Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK), con presencia en Turquía, y el Partido por una Vida Libre del Kurdistán (PAJK), con presencia en Irán, han alcanzado este sábado los cien días de huelga de hambre alterna para pedir el fin del aislamiento al que está sometido el líder kurdo Abdulá Ocalan desde hace 22 años en Turquía.
El vicepresidente de la comisión de Dechos Humanos del partido político prokurdo Partido Democrático de los Pueblos (HDP), Ümit Dede, ha recordado en rueda de prensa que la acción de protesta comenzó el 27 de noviembre con "miles" de adherentes para protestar por la situación de Ocalan y "las prácticas ilegales contar la dignidad humana a las que se somete a los presos", en declaraciones recogidas por la agencia de noticias kurda Firat.
Dede ha señalado que la huelga de hambre es "más significativa" debido al riesgo que supone la pandemia de coronavirus para las prisiones. "La huelga de hambre en las prisiones ha alcanzado 100 días. Esta huelga de hambre es una resistencia para defender el honor", ha remachado.
Ocalan fue capturado en Kenia el 15 de febrero de 1999 en una operación que contó con la colaboración clave de los servicios secretos israelíes. Fue entregado a Turquía y condenado a muerte por traición y separatismo y desde entonces se encuentra preso en la isla cárcel de Imrali, en el mar de Mármara, donde es el único interno.
Está considerado el líder del PKK, el PAJK y el Partido de la Unión Democrática sirio (PYD), facciones que aspiran a la independencia del Kurdistán histórico, repartido ahora entre Turquía, Irak, Siria e Irán, así como un pequeño enclave ubicado en Armenia, si bien la mayoría está en territorio turco.