MADRID, 3 Dic. (EUROPA PRESS) -
El primer contingente de la misión de la Comunidad Africana Oriental (EAC, por sus siglas en inglés) ha comenzado a retirarse de sus posiciones en la violenta provincia de Kivu Norte, en el noreste de República Democrática del Congo, después de que el Gobierno congoleño decidiera poner fin a su operación tras denunciar su incapacidad para enfrentarse a las temibles milicias de la zona.
El destacamento, formado por un centenar de militares kenianos, ha salido de la capital del estado, Goma, con destino a Nairobi a primera hora de la mañana de este domingo, confirman fuentes de Radio Okapi.
La misión, que solo ha durado un año, tenía como objetivo proteger a la población civil de las milicias del Movimiento 23 de Marzo (M23), cuyo enfrentamiento con las fuerzas congoleñas había provocado un éxodo regional. Sin embargo, los propios congoleños habían acusado a los elementos de esta misión de actuar codo con codo junto a las propias milicias.
De momento no hay más detalles sobre el futuro calendario de retirada de la misión, que también comprende a militares ugandeses y burundeses.
El M23 es un grupo rebelde formado principalmente por tutsis congoleños y que opera principalmente en la provincia. Tras un conflicto entre 2012 y 2013, RDC y el grupo firmaron en diciembre un acuerdo de paz. En dichos combates, el Ejército congoleño contó con apoyo de tropas de Naciones Unidas.
El grupo lanzó una nueva ofensiva en octubre de 2022, recrudecida a partir de noviembre, lo que provocó una crisis diplomática entre RDC y Ruanda por su papel en el conflicto. Kigali ha acusado a Kinshasa de apoyar a las Fuerzas Democráticas para la Liberación de Ruanda (FDLR), un grupo armado rebelde fundado e integrado principalmente por hutus responsables del genocidio de 1994 en Ruanda.