BRUSELAS, 28 Jun. (Reuters/EP) -
El primer ministro checo, Bohuslav Sobotka, se ha sumado este martes a los llamamientos de los países de Europa central y del este a controlar las competencias de la Comisión Europea tras la decisión de Reino Unido de abandonar el bloque.
El resultado a favor del 'Brexit' en el referéndum del jueves pasado ha generado alarma en los antiguos países comunistas, que veían en Reino Unido un aliado euroescéptico en sus esfuerzos por reducir el control centralizado en Bruselas.
"Necesitamos cambiar el conjunto del funcionamiento de la UE y creo que es necesario cambiar el funcionamiento de la Comisión Europea", ha sostenido Sobotka. "Los estados miembro deberían ser el motor de los cambios positivos en la UE (...) estaría muy feliz si la Comisión ayudara más a encontrar compromisos en la UE", ha añadido.
La tensión entre la Comisión Europea, que redacta la legislación comunitaria, y los 28 estados miembros, que ejercen la autoridad suprema de forma colectiva en el Consejo, ha sido algo permanence en las seis décadas de historia.
Pero la Comisión presidida por el luxemburgués Jean-Claude Juncker ha irritado particularmente a algunos estados miembro, principalmente en el este, con sus esfuerzos de imponer cuotas fijas de refugiados llegados a Europa.
República Checa actualmente ejerce la presiencia rotatoria del Grupo de Visegrado, que integran también Polonia, Eslovaquia y Hungría.
Sin embargo, Sobotka no ha ido tan lejos como su ministro de Exteriores, que dijo que Juncker era la persona equivocada para el cargo, o el de Polonia, que sugirió que los principales altos cargos de la UE deberían dimitir tras el 'Brexit'.
"Me gustaría que la Comisión respetara más las decisiones del Consejo Europeo", ha afirmado Sobotka. "Si nosotros hemos acordado que no hay consenso, por ejemplo, en un mecanismo obligatorio de reparto de refugiados, es imposible que la Comisión lo ignore".