El país atraviesa una crisis energética derivada de la invasión de Ucrania por parte de Rusia, que era su principal proveedor de gas
MADRID, 5 (EUROPA PRESS)
El primer ministro de Moldavia, Dorin Recean, ha forzado este jueves la dimisión de su ministro de Energía, Víctor Parlikov, y otros dos altos funcionarios de empresas vinculadas al sector, por su deficiente gestión de la crisis energética que afecta al país desde el estallido de la guerra en Ucrania.
Según ha explicado Recean, Parlikov debía dimitir por los "errores" que han conducido a Moldavia a una situación de "crisis". Junto al ministro, el jefe de Gobierno moldavo ha pedido la dimisión del director de la estatal Energocom, Victor Benzari, y del líder del consejo de supervisión de la gasística Moldovagaz, Sergei Tofilat.
Más tarde, la presidenta del país, Maia Sandu, ha firmado un decreto por el que suspende a Parlikov como ministro de Energía.
Recean ha acusado a Benzari de no haber comprado gas cuando fue posible, "escudándose en trámites burocráticos" e imposibilitando así que se pueda garantizar el suministro durante el invierno. Por otro lado, a Tofilat le acusa de "bloquear la compra de gas por parte de las instituciones responsables en un momento en que era más rentable".
Así las cosas, en el momento en que el ministro Parlikov presente su renuncia al cargo, será el propio Recean quien ejerza las funciones de encargado de Energía. El mandatario ha adelantado que pedirá al Parlamento que declare el estado de emergencia en el sector energético, según recoge el portal de noticias Newsmaker.
"Como ya dije, nos enfrentamos a un invierno difícil y con muchos riesgos, y he decidido pedir al Parlamento que introduzca el estado de emergencia en el sector energético, a partir del 16 de diciembre hasta que mejore la situación del suministro de gas a nuestros ciudadanos", ha manifestado.
LOS SEÑALADOS RESPONDEN
Una vez el primer ministro moldavo ha señalado directamente a estos tres altos cargos de la Administración, el responsable de Energocom ha mostrado su sorpresa por las demandas de Recean y ha asegurado que precisamente el miércoles ambos mantuvieron una reunión para fijar una 'hoja de ruta' para el próximo año.
Respecto a las acusaciones de Recean sobre su incapacidad para adquirir reservas de gas, Benzari ha defendido que Energocom siempre participó en todas las licitaciones y que si la empresa gasística Moldovagaz no compro gas, no fue su culpa. "Durante tres años he hecho mi trabajo profesionalmente", ha dicho.
Por su parte, Tofilat, jefe del consejo de supervisión de Moldovagaz, ha acusado al primer ministro Recean de "difundir desinformación" al responsabilizar a la gasística estatal de bloquear las compras. Tofilat ha aprovechado para defender su gestión, aunque ha abogado por investigar posibles errores procedimentales en la empresa.
Moldavia ha experimentado una situación de crisis energética desde el estallido de la guerra en su país vecino Ucrania, a finales de febrero de 2022. El país se abastecía en su mayoría de un gas ruso que ahora no llega o al que han renunciado como respuesta a la invasión.