Archivo - El primer ministro de la Autoridad Palestina, Mohamed Shtayé. - Europa Press/Contacto/Ahmed Al-Atari - Archivo
MADRID, 3 Ene. (EUROPA PRESS) -
El primer ministro de la Autoridad Palestina, Muhamad Shtayé, ha acusado este miércoles a Israel de utiliza el hambre como arma de guerra en la Franja de Gaza, impidiendo que entre la ayuda humanitaria y los alimentos necesarios para una población que debilitada ha quedado expuesta a las epidemias y a las enfermedades.
Así, ha alertado de que la Franja de Gaza está siendo escenario de "escenas impactantes", en las que "bebés se han quedado sin leche, después de que muchas de sus madres hayan sido asesinadas" y en las que "niños hacen largas filas para ganarse la vida sin obtener su turno".
"Son ya 89 días de hambre con el fin de matar (...) la gente ha perdido sus fuerzas y no puede ya sostener sus cuerpos demacrados", ha denunciado este miércoles Shtayé al inicio de una sesión de gobierno, que recoge la agencia WAFA.
"La hambruna en Gaza ha sido causada para impedir la entrega de alimentos. La ocupación israelí es un criminal que mata por inanición, que impide la entrega la llegada de alimentos. El mundo debe lanzar alimentos con paracaídas y presionar a Israel para abra los cruces para traer alimentos", ha reclamado Shtayé.
Por otro lado, el primer ministro palestino ha agradecido a Sudáfrica la denuncia que ha presentado ante la Corte Internacional de Justicia de La Haya contra los crímenes cometidos por Israel contra el pueblo palestino, pero ha lamentado que haya sido el único país en hacerlo.
"¿No hay más gente en el mundo que Sudáfrica para presentar casos contra Israel en la Corte Internacional? Estos crímenes no deben quedar impunes e Israel debe pagar el precio de los crímenes contra nuestro pueblo", ha defendido.
Por último, Shtayé también ha tenido palabras de recuerdo para el 'número dos' del brazo político de Hamás, Salé al Aruri, muerto el martes tras un ataque con dron cuando se encontraba en las oficinas que el grupo tiene en Beirut, la capital de Líbano. Israel ha optado por no pronunciarse al respecto.