MADRID 1 Dic. (EUROPA PRESS) -
El principal candidato opositor a la Presidencia de Gambia, Adama Barrow, ha hecho este miércoles una promesa de cambio en caso de imponerse en los comicios de este jueves, en los que se enfrenta al actual mandatario, Yahya Jamé.
"Los votantes saben que soy genuino y que estoy preparado para el cambio, y por eso es por lo que deberían confiar en mí", ha dicho, en una entrevista concedida a la cadena de televisión británica BBC.
Barrow ha tenido también palabras para las declaraciones ofrecidas el martes por Jamé a esta misma cadena, cuando defendió que en sus más de 20 años en el poder ha llevado al país "de la edad de piedra a la modernidad".
El mandatario hizo especial hincapié en los avances a nivel de educación y sanidad, si bien el líder opositor ha recalcado que "calidad y cantidad son dos cosas totalmente diferentes".
"Tenemos colegios, pero no profesores, ni sillas, ni buen material educativo. Tenemos hospitales, pero no medicinas ni doctores cualificados", ha lamentado.
Barrow fue elegido por la coalición Partido Unido Democrático (PUD), integrada por los siete principales partidos de la oposición en octubre como su candidato, mientras que en la pugna también participará Mamma Kandeh, líder del Partido Democrático de Gambia y antiguo miembro de la Alianza para la Reorientación y la Construcción Patriótica (APRC) del presidente.
Organizaciones como Amnistía Internacional y Human Rights Watch (HRW) han criticado las violaciones de derechos fundamentales en el país, donde Jamé --quien lleva en el poder desde 1994-- ha perseguido de forma especial a la comunidad LGTBI, así como a la oposición y a los periodistas.
Así, alrededor de 50 personas fueron arrestadas entre abril y mayo, incluyendo al líder del PUD, Ousainu Darboe, y a otros 18 altos cargos de la formación.
Además, once opositores fueron condenados en julio a sentencias que oscilan desde sanciones económicas hasta tres años de cárcel y dos de los detenidos, entre ellos el secretario nacional del partido, Solo Sandeng, quien presuntamente fue torturado, murieron bajo arresto.
Antes del inicio de la campaña electoral, también se produjo el arresto de varios periodistas. En este sentido, HRW reclamó a las autoridades gambianas que pusieran fin a "la intimidación y las amenazas contra los medios" con el fin de que los ciudadanos pudieran ser capaces de "tomar decisiones informadas" a la hora de votar.
La falta de libertades, las desapariciones forzadas y las torturas, sumada a la falta de oportunidades y la pobreza, han provocado que muchos jóvenes gambianos hayan abandonado el país en los últimos años.
Europa se ha convertido en el destino final para muchos de ellos, aunque para alcanzarlo tengan que atravesar el desierto del Sáhara y el Mediterráneo.
Según los últimos datos del Alto Comisionado de la ONU para los Refugiados (ACNUR), de los más de 347.000 inmigrantes y refugiados que han llegado por mar a Europa este año, un tres por ciento son gambianos.
Si se tienen en cuenta solo los casi 171.000 llegados a Italia, entonces representan el siete por ciento, solo por detrás de los nacionales de Nigeria, Eritrea y Sudán.