Kyagulanyi advirtió que no aceptará los resultados si el proceso tiene irregularidades
MADRID, 14 (EUROPA PRESS)
El presidente de Uganda, Yoweri Museveni, y el principal candidato opositor a la Presidencia, Robert Kyagulanyi, han depositado sus votos en el marco de las presidenciales y parlamentarias que se celebran este jueves, marcadas por un repunte de las tensiones y un bloqueo total de las redes sociales desde la jornada del martes.
Kyagulanyi, un popular cantante conocido como Bobi Wine que se presenta como candidato de la Plataforma de Unidad Nacional (NUP), ha depositado su voto a primera hora del día junto a su esposa, Barbie Kyagulanyi, según ha recogido la cadena de televisión ugandesa NTV.
Sin embargo, Museveni se ha hecho esperar y ha acudido a votar a pocos minutos del cierre de los colegios electorales, en su caso en la localidad de Nshwere. Pese a que los colegios han cerrado ya, las personas que siguen haciendo cola tienen autorización para votar.
La votación ha tenido lugar en un clima de aparente calma y sin incidentes de gravedad, después de que el candidato opositor advirtiera el miércoles que no aceptaría los resultados si la NUP los considera irregulares.
"El partido que encabezo respeta el resultado de las elecciones si son celebradas de forma independiente, libre y justa y si el recuento cuenta con absoluta transparencia", dijo, en una entrevista concedida a NTV. Así, desveló que la NUP ha establecido un centro independiente de recuento de votos para comparar los resultados oficiales con sus datos. "Somos como el agua corriente. Nos paran aquí, pero surgimos en otra dirección", dijo.
"Que los ugandeses tengan confianza en que la NUP ganará y en que la libertad volverá en una nueva Uganda", manifestó, antes de denunciar la represión por parte de las fuerzas de seguridad contra manifestantes, activistas y seguidores de su partido.
Las elecciones tendrán en un contexto especialmente tenso debido al aumento de la represión contra la oposición y la muerte de más de 50 personas en noviembre a causa de la acción de las fuerzas de seguridad contra manifestantes tras la detención de Kyagulanyi durante un acto de campaña.
Kyagulanyi será el principal rival del actual presidente, Yoweri Museveni, quien lleva al frente del país desde 1986 y quien intentará lograr un sexto mandato tras una serie de modificaciones constitucionales para que pueda concurrir a las urnas.
Por su parte,el presidente destacó el martes en una entrevista concedida a la cadena de televisión estadounidense CNN que "aceptará los resultados" si es derrotado en las urnas.
"Uganda no es mi casa. Si pierdo las elecciones, me iré a mi casa y haré mis cosas si los ugandeses no quieren que les ayude con las suyas. Me iré y abordaré mis asuntos personales muy felizmente", aseguró, si bien defendió que merece un sexto mandato al frente del país dados los avances conseguidos durante sus cerca de 35 años al frente de Uganda.
Por su parte, el secretario general de Naciones Unidas, António Guterres, hizo el miércoles un llamamiento a favor de unas elecciones "inclusivas, transparentes y pacíficas" y expresó su preocupación por las informaciones sobre "violencia y tensiones" en el país africano.
Así, pidió a "todos los actores políticos y sus seguidores que eviten recurrir al discurso del odio, la intimidación y la violencia" y ha agregado que "toda disputa electoral debe ser resuelta a través de los medios legales y pacíficos", según dijo su portavoz, Stéphane Dujarric.
Guterres reclamó además a las autoridades, "particularmente a las fuerzas de seguridad", que "muestren máxima contención durante este periodo y que actúen en línea con los principios de los Derechos Humanos", antes de reiterar el "compromiso" de la ONU en su apoyo a "promover un desarrollo sostenible y construir un futuro próspero" en el país africano.