TEGUCIGALPA, 23 Nov. (Reuters/EP) -
El candidato del Partido Nacional de Honduras, Porfirio Lobo, y el del Partido Liberal, Elvin Santos, cierran este lunes su campaña electoral de cara a las elecciones presidenciales del 29 de noviembre, envueltas en una gran confusión debido a la crisis política que vive el país desde el golpe de Estado del pasado 28 de junio.
El candidato de la oposición y favorito para alzarse con la victoria en los próximos comicios, Porfirio Lobo, pronunciará su último mitin en el estadio de beisball de Tegucigalpa, aunque aún se desconoce la agenda de su principal rival, el candidato del Partido Liberal del mandatario depuesto, Manuel Zelaya, para la clausura de la campaña.
Estos dos meses de pugna electoral han estado fuertemente marcados por la apatía de los votantes que podría aumentar el grado de abstencionismo registrado en los comicios de 2005, donde un 45 por ciento de los hondureños prefirieron no votar.
El ambiente de conflicto en el que se ha desarrollado la campaña electoral y las numerosas declaraciones a favor y en contra de la celebración de estos comicios han llevado al Gobierno interino a decretar el estado de emergencia, que prohíbe la tenencia de armas de forma provisional y establece el despliegue de 5.000 reservistas del Ejército para garantizar la seguridad durante las votaciones.
En este contexto, tanto Lobo como Santos se han negado a pronunicarse acerca de la posible restitución de Zelaya --sobre la que el Congreso decidirá el 2 de diciembre-- para evitar que aumenten los disturbios en el país centroamericano.