VARSOVIA, 12 Sep. (Reuters/EP) -
El partido gobernante en Polonia, Plataforma Cívica (PO), y el principal partido de la oposición Ley y Justicia (PiS) han abierto este sábado la campaña electoral para las legislativas de octubre con promesas para atraer votantes y unidos por su intención de incrementar el gasto público.
El PO, por detrás del PiS en los sondeos de opinión, ha anunciado su intención de introducir un tipo único de impuesto de la renta de las personas físicas y de acabar con las cotizaciones obligatorias a pensiones y seguro obligatorio. "Este es un proyecto que implica un gran cambio en la filosofía fiscal de Polonia", ha afirmado la primera ministra, Ewa Kopacz, en un acto del partido.
El PO ha señalado que estos cambios reducirían la recaudación en unos 10.000 millones de zlotys (unos 2.300 millones de euros), pero ampliaría la base tributaria al reducir los contratos de empleo temporal.
Polonia es uno de los países con más tasa de temporalidad de la Unión Europea. Estos contratos permiten a los trabajadores ganar sueldos mayores pero en cambio o no reciben prestaciones de seguridad social o son muy limitadas.
El partido ha anunciado también que mantendrá la limitación del gasto y que lograría reducir el déficit al 1 por ciento del PIB en un plazo de cuatro años gracias, entre otras cosas, a una recaudación más eficiente del impuesto sobre el valor añadido (IVA).
Por otro lado, el partido de la oposición, el PiS, ha mantenido su plan inicial de un nuevo impuesto en bancos y supermercados, impuestos más bajos para las pequeñas empresas, pero ha anunciado su compromiso con medicinas gratuitas para personas mayores de 75 años.
El PiS, que lidera una alianza conservadora, anunció en julio que quería aumentar el gasto público hasta el 2,3 por ciento de PIB con políticas como reducir la edad de jubilación y aumentar las prestaciones por hijo. Gran parte de la financiación procedería de una recaudación de impuestos más eficiente.
El último sondeo augura un 38 por ciento de apoyo para el PiS, mientras que el PO se quedaría en el 23 por ciento con vistas a las elecciones del 25 de octubre. Sin embargo, los sondeos cambian notablemente en cortos periodos de tiempo.