MARSH HARBOUR (BAHAMAS), 9 (Reuters/EP)
Los servicios de rescate continúan trabajando en las zonas más devastadas de Bahamas tras el paso del huracán 'Dorian' para intentar localizar los cuerpos de los fallecidos. Hasta el momento, se han confirmado 43 víctimas mortales, pero se teme que el número de fallecidos sea mucho mayor a medida que se registren las zonas de las que ya se han retirado las aguas.
Un corresponsal de Reuters ha sido testigo de cómo los trabajadores, ataviados con monos blancos, registran la zona utilizando aparatos de geolocalización para marcar las ubicaciones de cuerpos en el barrio de Mudd, en Marsh Harbour, en la isla del Gran Ábaco.
Mientras, las agencias humanitarias continúan el trabajo de reparto de alimentos y otros suministros esenciales mientras las autoridades intentan gestionar al enorme número de desplazado, con miles de personas que han viajado hasta la capital, Nassau. Cientos de personas más han huido a Estados Unidos.
El domingo la Agencia Nacional de Gestión de Emergencias de Bahamas informó de que 2.500 personas han sido evacuadas de Bahamas, la gran mayoría procedentes de Ábaco, una de las regiones más azotadas por una tormenta que generaba rachas de hasta 320 kilómetros por hora.
La Agencia ha informado de que se ha alojado en los refugios a unas 1.100 personas, mientras que otras muchas han sido acogidas por amigos y familiares. Así, ha instado a las familias cuyas casas no han sido dañadas a abrir sus puertas para acoger a desplazados.
El Programa Mundial de Alimentos (PMA) estima que el 90 por ciento de los edificios e infraestructuras de Marsh Harbour están dañados y ha alertado de que muchos de los desplazados no cuentan con acceso adecuado al agua, la electricidad o instalaciones de saneamiento.
Además, el PMA apunta a que hay unas 70.000 personas que necesitan alimentos o refugio y las aseguradoras estiman en unos 3.000 millones de dólares los daños en propiedades aseguradas en todo el Caribe. También es alto el riesgo de brotes de diarrea o disentería por la contaminación de los acuíferos, según la Organización Panamericana de la Salud (OPS).